Donald Trump y Mahmud Abas

Abas rehusa recibir al vicepresidente de EEUU tras la decision sobre Jerusalen

Después de que Washington reconociera a Jerusalén como capital de Israel, decisión que generó enfrentamientos en los Territorios palestinos que dejaron cuatro muertos.

El presidente palestino Mahmud Abas rehusó este sábado reunirse en diciembre con el vicepresidente estadounidense Mike Pence, después de que Washington reconociera a Jerusalén como capital de Israel, decisión que generó enfrentamientos en los Territorios palestinos que dejaron cuatro muertos.

Dos palestinos murieron este sábado en ataque aéreo israelí en represalia por disparos de cohete desde la Franja de Gaza, un día después de que la ONU advirtiera contra una “violenta escalada” tras la controvertida decisión de Donald Trump sobre Jerusalén.

Otros dos perecieron el viernes, durante un llamado “Día de la Ira” en Jerusalén, Cisjordania ocupada y Gaza, cuando miles de palestinos se enfrentaron a soldados y policías israelíes. En esos enfrentamientos se produjeron además decenas de heridos.

Este sábado, Majdi al Jalidi, consejero diplomático del presidente Abas, dijo a la AFP que “no habrá encuentro con el vicepresidente estadounidense en Palestina”, durante la visita de Pence a la región a mediados de diciembre.

“Con esta decisión sobre Jerusalén, Estados Unidos ha traspasado todas las líneas rojas” subrayó el consejero.

También el papa Tawadros II de la iglesia copta ortodoxa de Egipto anuló un encuentro con Pence, previsto a mediados de mes en El Cairo, alegando que la decisión de Washington “desprecia los sentimientos de millones de árabes”.

Piedras en Cisjordania

En Cisjordania, territorio palestino ocupado por el ejército israelí desde hace 50 años, manifestantes volvieron a enfrentarse este sábado por la mañana contra soldados israelíes en Belén. Jóvenes palestinos lanzaron piedras contra los militares, que replicaron con gases lacrimógenos.

Entretanto, en la Franja de Gaza, los habitantes de este territorio expresaron su rabia durante los funerales de los dos palestinos muertos el viernes durante enfrentamientos con las fuerzas israelíes, así como los otros dos que perecieron pocas horas antes en los bombardeos aéreos del Estado hebreo.

En un comunicado, el ejército israelí afirmó haber efectuado el sábado de madrugada varios bombardeos contra objetivos “militares” en la Franja de Gaza en represalia por los cohetes disparados la víspera desde ese territorio.

“En respuesta a los disparos de cohetes hacia el sur de Israel el viernes, la aviación apuntó a cuatro estructuras de la organización terrorista Hamas en la Franja de Gaza”, aseguró.

Según un responsable de Hamas, dos palestinos de 28 y 30 años murieron el sábado en un ataque israelí a una base del brazo armado de Hamas, las Brigadas Ezzedin al Qasam, en Nuseirat.

El viernes, los ataques aéreos israelíes contra objetivos de Hamas causaron 14 heridos, entre ellos mujeres y niños, según los socorristas del movimiento islamista.

Manifestaciones y críticas

Todo ello se produce tras la decisión unilateral del presidente estadounidense Donald Trump de reconocer a Jerusalén como capital de Israel, lo que también generó manifestaciones multitudinarias en varios países musulmanes, así como duras críticas de la comunidad internacional.

Jerusalén y la Explanada de las Mezquitas, tercer lugar santo del islam, también venerado por los judíos como el Monte del Templo, cristaliza las tensiones entre israelíes y palestinos.

Israel extendió su control a la parte oriental de Jerusalén en 1967 y la anexó para proclamar luego toda la ciudad como su capital, lo que la comunidad internacional nunca reconoció.

Los palestinos quieren hacer de Jerusalén Este la capital del Estado al que aspiran.

En solidaridad con los palestinos, decenas de miles de personas se manifestaron en varios países contra la iniciativa de Trump, aplaudida en cambio por la clase política israelí.

Esa movilización árabe, sin ser de momento masiva, alimenta no obstante temores de que Trump haya abierto la caja de Pandora.

La ONU está “muy preocupada por los riesgos de una escalada de violencia” en la región, dijo el coordinador especial de la ONU para la paz en Medio Oriente, Nikolai Mladenov, ante el Consejo de Seguridad reunido de urgencia en un video desde Jerusalén.

La decisión de Trump “no favorece la perspectiva de paz en la región” y “no es conforme con las resoluciones del Consejo de seguridad”, afirmaron los embajadores de Francia, Reino Unido, Italia, Suecia y Alemania en la ONU.