El acuerdo no atenua la migracion a Grecia

La premura exigida en la aplicación completa del acuerdo alcanzado entre la Unión Europea (UE) y Turquía para la devolución de migrantes ha pillado a Grecia sin medios suficientes para cumplir, mientras el flujo de refugiados no cesa y se ha superado ya la cifra de 50.000 en todo el país.

Un total de 1.662 personas desembarcaron en las islas del Egeo oriental en las últimas 24 horas. La mayoría, 830 personas, arribaron a la isla de Quíos, mientras que en la de Lesbos desembarcaron 698.

La Comisión Europea (CE) calculó que Grecia necesita el envío de 4.000 miembros de varios organismos internacionales como Frontex, aunque todavía no ha llegado nadie enviado por los Veintiocho, confirmó el portavoz del alcalde de Lesbos, Marios Andriotis.

Sí han llegado a la isla de Quíos, sin embargo, seis de los agentes de policía turcos que, en calidad de observadores, están encargados de supervisar la aplicación del acuerdo y de las devoluciones, y se espera que lleguen 19 más a Lesbos, Samos, Leros y Kos.

Cinco policías griegos ya están en Turquía para realizar una tarea homóloga.

El alcalde Andriotis asegura que tampoco hay información oficial sobre cómo deben aplicar el acuerdo: “Esperamos instrucciones. Nos pidieron incrementar los puestos de acogida hasta los 6.500-7.000 y lo hemos hecho”.

El acuerdo entre la Unión Europea (UE) y Turquía convierte de facto lo que hasta ahora eran centros de acogida en centros de detención.

Las autoridades griegas no pueden precisar la cifra total de migrantes que llegaron después de la aplicación del acuerdo y que, por tanto, tendrán dos opciones: pedir asilo o ser devueltos a Turquía.

Andriotis dice que todavía no ha recibido instrucciones concretas sobre este asunto, pero explica que para ser transformado de centro de acogida a centro de detención “necesitará obras”.

Yorgos Kyritsis, portavoz del Gobierno para la gestión de los refugiados, contó que los migrantes que llegaron “desde ayer (domingo) están bajo custodia y protección. Los anteriores tienen libertad”.

Fuentes de la policía de la isla de Lesbos explicaron, por su parte, que con estos nuevos migrantes recién desembarcados son alrededor de 1.000 las personas que están privadas de libertad por haber llegado después del comienzo del acuerdo, cuya aplicación inició a la medianoche del domingo.

El Gobierno empezó a desalojar el sábado las islas con el objetivo de vaciar los centros de registro y dejarlos listos solo para los que vayan a ser devueltos a Turquía.

Sin embargo, la falta de medios de locomoción y las nuevas llegadas complican esta tarea y en estos momentos hay 5.538 migrantes y refugiados en las islas, entre los que ya estaban y por tanto pueden ser trasladados todavía a la península y los que tienen que regresar salvo que soliciten asilo.