La Agenda Legislativa amenazada por los rezagos y la coyuntura
Una ‘camisa de fuerza’ con tendencia a romperse. Para la Asamblea Nacional no será fácil cumplir la robusta Agenda Legislativa que presentó a inicios de esta semana. Los recientes antecedentes dejan en evidencia que las intenciones chocan con la realidad.
Ya hay las primeras alertas. Los legisladores pretenden tratar 84 reformas y proyectos de ley, de iniciativa propia, en los próximos 365 días. Sin embargo, hay una gran cantidad de propuestas rezagadas del anterior período que serán analizadas a la par.
Ahora ya no depende únicamente de la presidenta de la Asamblea, sino de la unidad que mantengamos los asambleístas. Hasta ahora hemos cumplido con todas las etapas.
Lo dijo ayer la presidenta de esta entidad, Guadalupe Llori, que informó que unos 400 proyectos que están demorados ya están siendo enviados a las Comisiones de la Asamblea. En algunos casos, las propuestas están listas para el segundo debate en el pleno, pero otras apenas han pasado el primero, lo que significará un esfuerzo adicional de las mesas legislativas.
“Vamos a tratar los proyectos priorizados de acuerdo a los cinco ejes que hemos planteado (ver gráfico) y en paralelo al tratamiento de nuestras propias iniciativas trataremos los rezagados. No podemos dejar de lado nuestra agenda propia”, señaló ayer Llori en entrevista con Radio Sucesos.
A veces estas reuniones y acuerdos para hacer las agendas se dan entre jefes de las bancadas que ni siquiera representan el sentir de todos los miembros de su bancada legislativa.
Una atadura innecesaria y condenada a no cumplirse, según el exlegislador Héctor Yépez, quien dijo a EXPRESO que no estuvo de acuerdo con esta práctica cuando fue parte de la Asamblea y ve como un error que se insista en ella, más con la experiencia de 2020 cuando la pandemia trastocó todos los planes.
“Evidentemente debe haber un consenso entre los asambleístas sobre los temas más apremiantes y en función de las iniciativas que se vayan presentando darle una prioridad. Pero nadie puede predecir qué proyectos de ley se van a presentar de aquí a seis meses”, dijo Yépez.
No es lo único que deberá superar la Agenda Legislativa de iniciativa propia de la Asamblea para intentar que se cumpla hasta junio de 2022. La Función Ejecutiva también tiene sus propias propuestas que podrían trastocar el cronograma de la minga de cinco ejes planteada por Llori.
Esta es una nueva Asamblea que tiene el compromiso de cumplir lo que propone a los ecuatorianos. En este primer mes de funciones hemos demostrado con trabajo.
Si bien la reforma a la Ley de Educación Superior, que prevé enviar el presidente Guillermo Lasso a mediados de julio, coincide como prioridad con la Asamblea, otras como la Ley Orgánica de Libertad de Expresión y Comunicación, enviada el 25 de mayo pasado, no están dentro de la lista de los legisladores.
Esta normativa, que busca reemplazar a la actual Ley de Comunicación, aún está en la Unidad Técnica Legislativa que elabora un informe que será enviado al Consejo de Administración Legislativa (CAL) para ser calificado o desechado.
