Alba Sillero Vigil: “El respeto al profesor es una clave del exito de Finlandia”
Desde que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) comenzara en el año 2000 a elaborar su informe PISA (Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos), Finlandia ocupa los primeros puestos del podio en Europa por su
Alba Sillero Vigil, experta en educación bilingüe y docente finlandesa, está en Guayaquil para ofrecer charlas sobre el modelo educativo de Finlandia y para compartir sus experiencias con docentes de varias entidades educativas de la ciudad. Ella conversó con EXPRESO sobre lo que muchos llaman ‘El milagro finlandés’.
- ¿Por qué Finlandia tiene la mejor educación del mundo?
- La clave está en la figura del profesor que es respetada porque está bien formada; en la igualdad educativa, ya que las escuelas son en su mayoría públicas; en la innovación, donde se trata de dejar los libros de textos y la didáctica obsoleta para entregarle a los niños lo que verdaderamente necesitan. Además, los alumnos tienen entre 20 y 35 horas de clases semanales, de acuerdo a su nivel. Eso les permite dedicar más tiempo a actividades en familia.
- Allá el profesor es reconocido como una persona importante en la sociedad ¿Por qué?
- El docente es el experto que mejor sabe lo que cada uno de sus alumnos necesita. La clave, por lo tanto, se encuentra en la plena confianza en el profesor, que es el que dispone de una libertad absoluta a la hora de elegir sus métodos de evaluación y horarios. Al profesor no se le cuestiona, ellos deciden lo que quieren dar, cómo y de qué manera. Finlandia es uno de los pocos países que a la hora de cambiar el currículo nacional tiene a los docentes involucrados.
- ¿La igualdad educativa que usted menciona, ¿qué aporte ha dado a los logros obtenidos?
- Finlandia no es un país que esté pendiente en cómo los resultados son o no visibles al resto del mundo. Allá no hay competencia entre las escuelas públicas y las pocas privadas que tenemos. Hay un consenso de que la educación es un derecho que tienen los alumnos y que es para todos.
- ¿En qué beneficia que no haya competencia?
- El no haber competencia entre las escuelas crea entre los niños un relax a la hora de aprender; y entre los profesores y equipo directivo de cualquier escuela, las ganas de seguir trabajando.
- ¿La educación gratuita en qué ha favorecido al estudiante?
- Todas las escuelas siguen el currículo finlandés nacional. Solo el 2 % de la educación es privada, pero no porque las familias pagan una cuota mensual, sino porque los planteles se centran más en algún tipo de religión y por eso es la ‘privatización’, que es más que nada una autonomía que ellos tienen a la hora de organizarse.
- ¿Ecuador puede adoptar el modelo educativo finlandés?
- Es imposible tomar un modelo educativo y querer acoplarlo en su totalidad. No se puede porque está contextualizado. Para hacerlo hay que tomar en cuenta la sociedad, el tipo de familia, la migración y el presupuesto económico para cada escuela. Lo que puede hacer es tomar ciertas cosas, de aquí de allá y contextualizarlo a su entorno.
- ¿Qué debe hacer un país para lograr el ‘milagro finlandés’?
- Primeramente debe tocar su currículo y centrarlo en lo que son las competencias transversales y alejarse un poco de los contenidos para insistir más en esos aspectos necesarios para la vida diaria. Esto no es cuestión de años, sino de iniciativa. La clave está en mirar, comparar y hacer lo que vendría mejor para el sistema.
- ¿Traer maestros finlandeses cambiaría el panorama?
- Si tomásemos a todo un profesorado formado en Finlandia y lo trajéramos a Ecuador no funcionaría y si tomásemos a todo los alumnos de Finlandia y le lleváramos profesores ecuatorianos, tampoco funcionaría, porque se necesita un conjunto de todo.
- ¿Qué papel juegan los padres de familia en este proceso?
- Hay que tomar más contacto con la familia, mantenerla un poco más en el aula, pero no solo para reuniones específicas. Hay que crear eventos lúdicos en la que participen activamente.