Fotos: Karina Defas

Andrea Perez: Inspirar con el ejemplo

Todo en ella converge en un concepto y estilo de vida que la ha acompañado desde siempre: el diseño.

En su memoria, se ve a sí misma correteando, creciendo y formando sus sueños, en las tiendas de su madre, Adriana Hoyos, quien hace 28 años creó su firma. “He visto a mis padres crear esta empresa, recorrido cada kilómetro, por eso la conozco a profundidad y la valoro en su verdadera dimensión”, dice Andrea.

Su formación da cuenta de una joven que busca retribuir todo lo que ha recibido en la vida, con responsabilidad y entrega. El talento lo tiene y de sobra. Sin presión alguna, el destino le tenía reservado un lugar en el mundo del diseño, pero, guiada por sus cánones de exigencia, busca superarse a sí misma, demostrando que puede y mucho más, considerando de dónde viene, una familia exitosa en todo sentido.

Más joven, la moda la envolvió y hacia allá se dirigía en Savannah College of Art Design, pero en el camino, el diseño interior triunfó, seduciéndola irremediablemente, por su trascendencia en el tiempo y el espacio. Acaso una de las mayores alegrías que le ha regalado a su madre.

En un primer paso, tras titularse, fue a Nueva York a buscar experiencia y solidez en importantes firmas —Lissoni Associati y Homepolish—, desarrollando proyectos de alta gama o VIP. Pero, orgullosa de ser ecuatoriana, su visión fue la de regresar a su tierra, con el estruendoso ímpetu de la juventud y la vorágine del modernismo que se imponen en el demandante medio en el que se desarrolla.

Ello, sumado a resultados asertivos en su campo, ha logrado también el ansiado respeto, dentro y fuera de la empresa. Su fuerte, dice, es “el diseño de experiencias”, es decir, cuando dibuja un mueble, un espacio o un aeropuerto —como las salas VIP de Quito o Guayaquil—, busca una interacción entre las personas y cualquier objeto o espacio, despertando sentimientos o emociones.

Su primer proyecto fue para Unicef, en la campaña ‘End violence’ (acabar con la violencia), enfocada en erradicarla de los niños, creando una serie de esculturas de edición limitada, para recaudar fondos en pro de la misión. Sus hermosos ojos marrones se prenden cuando cuenta que, tras el terremoto del 2016, creó un ‘crowdfunding’ para recaudar fondos a nivel internacional, logrando una importante suma de dinero con lo que elaboró 500 camas en la fábrica de muebles de sus padres, y, con colchones, las repartió en diferentes localidades de la provincia.

Su sencillez de corazón se traduce en esta historia de vida que ha marcado en ella el sentido de la responsabilidad social, decidida a seguir aportando con lo que pueda en el futuro.

La trascendencia en el oficio

“Pienso que mi responsabilidad y labor es traer innovación e ideas modernas a la empresa, que son muy bien aceptadas, pero mi madre, con su experiencia y conocimiento, me asienta y guía. Somos un equipo muy chévere. Trabajamos y viajamos a ferias por todo el mundo y, aunque a veces tenemos “choques creativos” eso me permite crecer profesionalmente y a mi madre la obliga a abrirse también”.

Tras varios años de ejercicio profesional y concienciación de su oficio, Andrea se ha ganado el título de Directora Creativa adjunta, en las dos empresas —una de fabricación y comercialización de muebles, y la segunda, dedicada al diseño interior ad hoc—, lideradas también por su padre, Eduardo Pérez, quien impulsó desde el inicio todo el concepto y expansión empresarial de la firma. “Mi papá desde niña me decía “Dream big” (o sueña en grande), y esa frase me inspira para poder llevar la marca a otro nivel, que trascienda aún más, porque si bien es reconocida en toda Latinoamérica, quisiera que se convierta en un icono de moda, abriendo nuevos frentes e innovando siempre”.

De esta forma, Andrea se siente feliz de trabajar en equipo, con el compromiso absoluto de darlo todo, por ello, sus ambiciones profesionales se multiplican, y, desde septiembre cursará una maestría en Nueva York, en la prestigiosa Parsons University. Otro sueño cumplido.

Conferencia Hall of dames

Andrea Pérez es una de las panelistas invitadas a esta conferencia a desarrollarse hoy, miércoles 19 de junio, de 18:00 a 21:00, en el Centro de Convenciones de Guayaquil, donde destacadas mujeres del medio compartirán sus testimonios de vida y herramientas para conseguir que ambos géneros puedan crear sociedades más justas. “Agradecida de participar con féminas que, como yo, estamos en el camino, sembrando poco a poco y desde un punto más jovial”. En ese sentido se considera feminista, pero no está de acuerdo con el enfrentamiento entre géneros, porque eso trae “guerras”, cuando debe existir alianzas.

Estima que el verdadero liderazgo de nosotras no debe ser ‘demandante o autoritario’ sino inspirador, partiendo del ejemplo. “He podido ver, a través de mujeres que he estudiado y con las que he podido trabajar que el éxito llega, inspirando a nuevas generaciones y no demandando en un sentido negativo, eso es la fuerza de la mujer”.

Personal

- Edad: 27 años.

- Estudios: Bachelor of fine Arts in Interior Design.

- Cursará una maestría en Diseño de Interiores en Parsons University.