Arenillas: arrojan un cuerpo maniatado a la maleza

María (nombre protegido), se llevó una gran sorpresa al ver una mano que salía de una funda de basura, arrojada en la maleza, detrás del estadio de la Liga Cantonal de Arenillas, provincia de El Oro.

Eran las 07:30 cuando la mujer, que se dirigía a comprar el pan, corrió hasta su vivienda para avisarle a su familia que vio una mano de un humano. Luego llegaron más personas y examinaron las fundas negras, encontrando que se trataba de una persona, estaba amarrada de pies y manos, su cabeza tapada con un trapo y embalado con fundas de basura.

“No es de este barrio, no sabemos a qué hora lo dejaron botado en este lugar, pero es preocupante que en nuestra ciudadela abandonen a una persona sin vida, preferimos estar encerrada porque la delincuencia en este sector está ganando terreno”, dijo otra moradora de la ciudadela Nueve de Octubre, lugar donde se encontró el cadáver.

Al sitio llegó la policía quien revisó el cuerpo y encontró documentación que identifique al ciudadano, luego de unos minutos se conoció que se trataba de Ariel Francisco Bone Andrade, más conocido como ‘negro bone’.

Bone vivía en Arenillas, lo veían por las calles consumiendo sustancias sujetas a fiscalización, por lo que su muerte se investiga.

Luis Suárez, jefe del Distrito de Policía de Huaquillas y Arenillas, indicó que se desconoce los motivos de su muerte, el personal de la Dirección de Muertes Violentas (Dinased) verificó si en el sector hay cámaras de seguridad, pero no hallaron ningún dispositivo que logre identificar a las personas que dejaron abandonado a Bone.

En la escena se encontró una piola color verde que habían utilizado los asesinos para amarrar a Bone, no había casquillos de bala, por lo que su muerte es un misterio.

Mientras el cuerpo era llevado al Centro Forense para la autopsia respectiva, los moradores de la ciudadela Nueve de Octubre, pedían más patrullajes por el sector y la limpieza de maleza de los alrededores del estadio.

“Esos montes generan que lleguen a fumar o se refugien los delincuentes, pedimos que se corte la maleza”, dijo una moradora.