La Asamblea en el dilema de dar prioridad a la fiscalización o a la aprobación de leyes
La presidenta propone menos comparecencias y más proyectos debatidos. Los legisladores no están muy dispuestos a dejar de lado una de sus atribuciones
Arranca el año con criterios divididos. La Asamblea Nacional (AN) busca la fórmula para intentar levantar su imagen en este 2022. La presidenta del Legislativo, Guadalupe Llori, dio una clave antes de finalizar el año pasado, pero no todos parecen dispuestos a acogerla en su totalidad. En una reunión con los presidentes de las comisiones, Llori les hizo conocer su preocupación por el lento avance de las propuestas presentadas en la Agenda Legislativa.
“Sugiero, al menos para los próximos seis meses, poner un alto a los llamados a comparecencias a los ministros. Que nos quedemos con los juicios políticos que tenemos y nos dediquemos a cumplir con la agenda. En verdad, estamos un poquito atrasados”, señaló a mediados de diciembre.
Algunas comisiones se han constituido en confesionarios al que llaman a todos los funcionarios y ministros, no permiten que trabajen y luego les acusan de incumplir funciones.
Según la funcionaria, esta sería una de las razones de la baja percepción ciudadana sobre los legisladores. Aunque no es común que suceda, esta vez coincide con Llori el presidente de la Comisión de Fiscalización, Fernando Villavicencio.
“Las comisiones están claramente identificadas para el trabajo que tienen que hacer. He planteado incluso a la presidenta que todas las comisiones y legisladores puedan gestionar las comparecencias y cualquier proceso de investigación a través de la Comisión de Fiscalización”, señaló Villavicencio.
Con el Ejecutivo hemos planteado que no podemos seguir en conflictos, vamos a seguir buscando el diálogo y la gobernabilidad sin que signifique claudicar en nuestros preceptos.
Rafael Lucero, jefe de la bancada de Pachakutik, considera que es necesario repotenciar los temas de la Agenda Parlamentaria de la que asegura se ha cumplido un 70 %, pero reconoce no es suficiente. Espera que en enero se puedan igualar con los proyectos rezagados.
Sin embargo, no considera que los asambleístas deban renunciar a una de sus atribuciones fundamentales: fiscalizar a los funcionarios públicos. “Podemos avanzar en las dos cosas. Hay temas de fiscalización que están pendientes en las comisiones que se deben dar continuidad, pero obviamente priorizando la construcción de las leyes”, señaló.
Pese a las incomprensiones, debemos seguir el mismo camino con el que iniciamos, repotenciando la Agenda Parlamentaria. Esta semana esperemos se presente la evaluación.
Ayer, se retomaron parcialmente las actividades en el Parlamento. La aparición de la variante ómicron de la COVID-19 hizo que varios funcionarios deban retirarse a sus hogares, por precaución, y que las comisiones legislativas vuelvan a sesionar de forma virtual.
Para el jefe de bloque de la Izquierda Democrática (ID), Alejandro Jaramillo, lo mejor que puede hacer la Asamblea para levantar su imagen es que las bancadas logren acuerdos mínimos para construir leyes y que esto incluya al Ejecutivo.
“Debemos superar los problemas, los conflictos y la coyuntura. La fiscalización y la construcción de leyes deben continuar a la par. Lo que debemos dejar de lado es cualquier intento de desestabilización”, señaló Jaramillo.
