Asambleístas correístas que estaban refugiados en la embajada vuelan a México
La Cancillería informó que Gabriela Rivadeneira y Soledad Buendía, entre otros, abandonaron la Embajada mexicana en Quito.
El Ministerio de Relaciones de Exteriores confirmó este 9 de enero de 2020 que los militantes de la revolución ciudadana, que se asilaron en la Embajada de México en Ecuador, partieron hacia la capital de ese país.
Paro Nacional: Rivadeneira, citada a dar versión desde la embajada de México
Leer másEn ese grupo se encuentran los asambleístas afines al correísmo, Gabriela Rivadeneira, Soledad Buendía, Carlos Viteri Gualinga y Luis Molina. Los tres primeros legisladores se refugiaron junto a sus esposos, Luis Flores, Fausto Jarrín y Tania Pauker, respectivamente. “Todos salieron” informó la Cancillería, sin dar nombres.
“Esto evidencia una vez más que detrás del discurso de persecución política está un interés de un sector que busca la impunidad” dijo el canciller José Valencia sobre los opositores, quienes viajaron a México. 👉 https://t.co/VSrmFs16oH pic.twitter.com/XIeKkQ8oHo
— Diario Expreso (@Expresoec) January 9, 2020
En una declaración de prensa leída la mañana de este 9 de enero, el canciller José Valencia, explicó que el Gobierno informó esta misma semana a la Embajada de México que daría todas las facilidades para que estas personas salgan del Ecuador
“Hoy, hace unos momentos, los ciudadanos en cuestión tomaron un vuelo comercial hacia la Ciudad de México, dijo Valencia.
Los asambleístas correístas, junto a sus parejas, habrían salido de la sede diplomática, ubicada en el norte de la capital cerca de las 05:00. El vuelo estaba programado para las 10:00 por la aerolínea Aeroméxico.
Esto evidencia, una vez más, como conoce la ciudadanía y la comunidad internacional que detrás del discurso de persecución política está un interés político de un sector que busca la impunidad
Octubre: una lista de debates pendientes
Leer másLos políticos decidieron refugiarse en la Embajada desde el 12 de octubre de 2018, luego de las violentas protestas lideradas por el movimiento indígena. La primera en ingresar a las oficinas mexicanas fue Rivadeneira.
“El Gobierno está seguro de que la conspiración para atentar contra la democracia y los hechos violentos de octubre serán esclarecidos por la justicia y los responsables serán sancionados siguiendo el debido proceso”, dijo el ministro de Relaciones Exteriores.
El refugio que duró cerca de tres meses se produjo pese a que sobre los asambleístas no pesa ningún proceso judicial en su contra.