
El asesinato del supuesto líder de una banda criminal local traerá cola
Era conocido como Morsa. La Policía lo ubica como cabeza de Los Lobos. La disputa por liderazgo generaría más violencia
Con el asesinato de Roger Joao Llerena Prieto, alias Morsa, surgen dos preguntas. ¿Quién tomará el liderazgo de la organización criminal de la cual era presuntamente el cabecilla y que ha originado terror entre los habitantes de Socio Vivienda 2 (noroeste porteño)? ¿Y la disputa por el liderazgo provocará más asesinatos?
Ante estas interrogantes, el coronel Henry Herrera, jefe de la Dirección Nacional de Investigación de Delitos Contra la Vida y Muertes Violentas (Dinased) Zona 8, respondió que tras la muerte de un líder, este es relevado por alguien de la misma banda, pero el problema es quién lo remplazará y qué códigos de comportamientos tiene con el resto de su organización.
“Hay que tomar en cuenta que muchas veces el irrespeto a estos códigos genera deslealtades y esto a su vez provoca más violencia que termina en muertes”, afirmó.
Llerena Prieto, de 27 años, fue asesinado a tiros la noche del pasado viernes en el plan habitacional Socio Vivienda 2. Junto a él, en un vehículo, iban otras tres personas, de las cuales dos fallecieron.
No fue fruto de un evento espontáneo, más bien fue algo planificado.
El jefe de la Dinased reveló que el crimen de Morsa y sus compinches fue planificado y que sus verdugos aprovecharon la hora y el momento adecuados para emboscarlo. “Toda acción tiene una reacción, no fue fruto de un evento espontáneo, más bien fue algo planificado, justamente por su nivel de violencia y el poder que estaba adquiriendo en este sector”.

Llerena era de uno de los principales líderes del crimen organizado en la zona y es quien dirigía diferentes tipos de delitos, como robos, secuestros, asesinatos y tráfico de droga, según información proporcionada por la Policía.
La carrera delictiva de Morsa, a quien se lo vinculaba a la banda Los Lobos, quedó en evidencia en 2016, pues ese año fue detenido por tenencia y porte de armas en el suburbio porteño. Pasó detenido 14 meses.
En 2018 lo aprehendieron por asaltar un bus y estuvo tres años encarcelado. Volvió a ser detenido en enero de 2021, esta vez por robo, permaneciendo medio año tras las rejas. En mayo de 2022 fue nuevamente apresado, pero dos meses después fue declarado inocente y quedó en libertad.
Se volvió a saber de él tras ser identificado por la Policía Nacional como uno de los muertos de un triple asesinato ocurrido la noche del viernes 30 de septiembre pasado, en la denominada etapa Pingüino de la urbanización Socio Vivienda 2.