Superioridad. Toda la alegría de los integrantes de la selección brasileña, que anoche humillaron a Uruguay y prácticamente sellaron su pasaporte al Mundial de Rusia 2018.

La Canarinha ya toca a la puerta de Rusia

Paulinho, el mediocentro que vino de China, y Neymar, el delantero que parece de otro mundo, se asociaron ayer para promover otra exhibición de lujo de Brasil, esta vez con una goleada de remontada por 1-4 a Uruguay en Montevideo que les deja con 30 pu

Paulinho, el mediocentro que vino de China, y Neymar, el delantero que parece de otro mundo, se asociaron ayer para promover otra exhibición de lujo de Brasil, esta vez con una goleada de remontada por 1-4 a Uruguay en Montevideo que les deja con 30 puntos y a las puertas del Mundial de Rusia.

El gol de penalti a los 9 minutos de Edinson Cavani, el goleador de la eliminatorias sudamericanas, dio una alegría efímera a la Celeste, que comenzó a vivir su pesadilla en el estadio Centenario a los 18 minutos con un golazo de media distancia de Paulinho.

El volante volvió a anotar a los 52 minutos y con el equipo uruguayo desmoronándose, apareció Neymar para marcar el suyo, con un ‘sombrero’ tras una veloz galopada a los 74.

Paulinho aún tuvo tiempo para inventar un gol que podría llamarse ‘pechinho’, pues con su pecho empujó el cuarto y definitivo tanto.

Uruguay perdió anoche el invicto de local que mantenía en el estadio Centenario y el Brasil de Tite aumentó su mito, pues ya son siete victorias desde que el entrenador llegó al banquillo de su selección.

De esta manera, la Canarinha se afianzó como el único líder de la tabla con 30 puntos, mientras que Uruguay se mantiene segundo con 23.

Brasil lleva 13 partidos sin perder y a este paso su presencia en la próxima cita ecuménica está prácticamente sentenciada, aumentando así el mito de la única selección que ha inscrito su nombre en todas las ediciones del Mundial.