La Cancillería de Ecuador busca nuevos embajadores

La carrera diplomática es similar a la militar. La persona que decida hacerlo, debe pasar por varios rangos para alcanzar al título de embajador. El inicio de su trayecto profesional arranca con la capacitación en la Academia Diplomática del Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana. Este centro de estudios volvió a abrir sus puertas para la formación estudiantil en octubre de 2020.

La entidad no otorga títulos de tercer nivel, sino que habilita a los profesionales ganadores de un concurso público previo para iniciar su formación como terceros secretarios; este es primer nivel de la carrera diplomática. Así pasan a ser funcionarios de la Cancillería ecuatoriana.

La actual promoción culminará sus estudios en 2022, no obstante, en el último trimestre del año habrá otra convocatoria para que nuevos profesionales ingresen a esta modalidad de estudio que comprende un año de aprendizaje teórico y otro de enseñanza práctica. Las clases iniciarán también en el año siguiente.

Una vez terminado el curso de terceros secretarios pasan a trabajar en las diferentes dependencias de la Cancillería antes de servir en el extranjero. “Hay un proceso de calificación anual que lo realiza la dirección de talento humano de la Cancillería y hay también tiempos mínimos de permanencia en las categorías para ascender a la superior”, detalla el embajador Alejandro Suárez, encargado del centro de estudios.

El tiempo de permanencia en cada categoría tiene un mínimo de cuatro años y adicional a ello, se cuenta la calificación anual para habilitar un ascenso al siguiente rango hasta llegar a embajador.

Los escalafones son seis: tercero secretario, segundo secretario, primer secretario, consejero, ministro y finalmente embajador. En total es una preparación que se logra entre 25 y 30 años de servicio. “Normalmente la regla que se aplica es 3 por 5: tres años en el país y cinco en el exterior, entonces así los funcionarios van rotando en el exterior y es a lo largo de toda la carrera”, explica Suárez.

Sin embargo, en 2011, durante la gestión del presidente Rafael Correa y bajo la administración de Ricardo Patiño como canciller, se dispuso el cierre del lugar y se detuvo la formación diplomática. “Hubo promociones de ascenso a gente que no era de carrera y pasaron a ser violentamente embajadores solo con tener el carné de afiliación de Alianza PAIS, reflejando que no tenía idea de lo que hacía. El servicio exterior es algo serio, en cualquier país”, señala el exvicecanciller Marcelo Fernández de Córdova.

De acuerdo a Suárez, en la administración de Patiño, hubo dos convocatorias para capacitaciones en el que más de 150 personas se inscribieron, pero su formación no fue con las “exigencias y parámetros” que contempla la academia diplomática.

La catedrática y coordinadora de Relaciones Internacionales en la Universidad Central del Ecuador, Ximena Ortiz Crespo, destaca el esfuerzo que ha retomado la Cancillería “para reclutar gente de muy alta calidad” y de ahí que pase por una profunda capacitación antes de llegar al servicio exterior. “Hay cancillerías en el mundo que son famosas por sus escuelas diplomáticas y la calidad de sus servidores y a eso es donde debemos aspirar, como por ejemplo la de Brasil, porque serán quienes nos representen”.

Fernández de Córdova y Ortiz Crespo coinciden en que producto de las buenas relaciones internacionales, Brasil es tomado en cuenta en diferentes organismos que existen en el mundo y aplauden que se disminuya la cuota política en la designación de embajadores en las diferentes misiones.

Desde la creación de la Academia Diplomática en 1987 hasta su cierre en 2011, tuvo 13 promociones con un promedio de 15 graduados en cada una de las levas.

Actualmente existen 25 estudiantes que en 2022 obtendrán el título de terceros secretarios, pero esto no significa que podrán ocupar las “bastante vacantes” que existen en el servicio exterior como manifestó el canciller Mauricio Montalvo hace varios días y EXPRESO lo recogió en un reportaje.

Fernández de Córdova recomienda varias alternativas para suplir las sillas vacías en las oficinas en el extranjero: la primera es buscar a los embajadores en servicio pasivo, “porque en la época de Correa hubo un retiro generalizado de gente que no debía salir todavía del servicio exterior debido a que no estaban de acuerdo con el régimen del momento”.

Otra opción es asignar responsabilidades de embajador a los servidores de rango de ministro o primer secretario según sus méritos y logros.

Por su parte, Ortiz Crespo alienta a esperar un poco más y a “confiar” en la reorganización que ejecutará el canciller.

EL DETALLE

Embajadores. Los diplomáticos de carrera tienen 30 años de formación profesional. El cierre de la Academia lesionó el número de representantes en el país.  

Diplomáticos

Las vacantes y los cambios

Según información de la Cancillería, Ecuador tiene 44 embajadas en el exterior, cada una, en naciones diferentes dentro de los cinco continentes. Además, hay 36 consulados, 11 de ellos en Estados Unidos, seis en España y tres en Italia.

Es decir, 80 sedes entre embajadas y consulados, de las cuales el Gobierno ha designado a 20 embajadores de carrera solo como jefe de misión, pero no como embajador oficial del país. 22 funcionarios están a cargo de las oficinas consulares.

De esta forma, 24 embajadas y 14 consulados no tienen comisionado al frente de dichas oficinas.

Sin embargo, estas no son las únicas delegaciones internacionales de Ecuador. Hay misiones que se caracterizan por una especie de asignación de delegado en entes como Unión Europea, Naciones Unidas, OEA entre otras, que suman seis representaciones permanentes. En el régimen anterior se cerraron 17 oficinas en el exterior.

Mientras se reorganiza y designa integrantes de la misión diplomática exterior, autoridades de Cancillería se reúnen con delegados y representantes de la diplomacia exterior en el país, para impulsar una política pública de transición ecológica y de cooperación internacional en otros temas.