El candidato del oficialismo aún no tiene rostro
Las alianzas están en veremos hasta 2020. Las figuras más fuertes perdieron puntos en los últimos meses.
El molde es complejo y, al menos por ahora, no hay nadie que parezca ajustarse. El anuncio del vicepresidente de la República, Otto Sonnenholzner, sobre la búsqueda de una candidatura oficialista para la Presidencia en 2021 despertó suspicacias en varios sectores. Expertos y otros movimientos políticos cuestionan la apuesta que hará el gobierno considerando su baja popularidad.
Sonnenholzner aseguró, en una entrevista en Teleamazonas el domingo 8 de diciembre de 2019, que el gobierno tendrá un candidato propio para las elecciones pero no precisó las características de ese individuo. ¿Saldrá de las filas de Alianza PAIS? ¿Es parte del gabinete? ¿Será el propio Sonnenholzner? Nada está dicho aunque las dudas se multiplican.
Que el candidato salga de Alianza PAIS es la opción que, al menos para los consultados por EXPRESO, es la menos probable.
Las razones son simples. PAIS aún está vinculado a la figura de Rafael Correa y en la Asamblea se ha hecho poco o nada para borrar esa marca. La ambigüedad en las votaciones del oficialismo dan cuenta de que no existe un Alianza PAIS que responda enteramente a la visión y postura del presidente Lenín Moreno.
La reforma tributaria fallida es un ejemplo. Cuando se solicitó su archivo, integrantes del movimiento gubernamental encabezaron los reclamos. Es decir, los legisladores de PAIS se opusieron al texto que propuso su presidente. Una muestra de democracia, dijeron los dirigentes.
Dudas sobre el CNE también como organizador de debates
Leer másLo cierto es que no parece existir un matrimonio entre el gabinete presidencial y el resto de la organización política.
La otra vía es buscar una alianza. En ese campo, el gobierno cuenta con un ‘amigo’ poco visible pero siempre presente: Democracia Sí. El movimiento liderado por Gustavo Larrea se plantea como una alternativa por la amistad que une al político con el primer mandatario.
Larrea, sin embargo, no quiere ser parte del debate... todavía. Él dijo a EXPRESO que cualquier decisión presidencial o de cualquier otro cargo de elección popular se tomará en el segundo trimestre del próximo año.
“Democracia Si tomará resolución sobre candidaturas y alianzas en su Convención Nacional, en abril del próximo año”, resaltó.
Pero, si no es PAIS ni hay avances con alguna alianza, ¿a quién se refería el vicepresidente? La alternativa que queda, en medio de la escasa información, es que uno de los integrantes del gabinete actual sea el escogido para ser el sucesor de Moreno. Ese camino, sin embargo, se topa con las encuestas como principal adversario.
Santiago Cuesta, exconsejero del primer mandatario, mencionó -a inicios del año- a la ministra de Gobierno, María Paula Romo, como posible candidata. Esa idea fue descartada, según integrantes del gabinete que conversaron con este Diario luego de la salida de Cuesta.
En parte, la eliminación de esa alternativa respondió a las encuestas de popularidad de la fundadora del movimiento Ruptura de los 25.
La ministra, aunque se mantiene en el cargo, ha sido cuestionada por el uso de bienes policiales y por su gestión durante las manifestaciones violentas de octubre. Incluso es parte de un juicio político en la Asamblea Nacional. Dicho juicio, sin embargo, pierde fuerza tras las exposiciones que ha hecho la funcionaria en su defensa.
Esa misma suerte corrió el nombre de Richard Martínez. El actual ministro de Economía y Finanzas gozó de aceptación popular y de los mercados externos cuando asumió el cargo en 2018. Un año después, su imagen se debilitó con las medidas emprendidas.
El último nombre visible, tal como informó EXPRESO, es el del propio Otto Sonnenholzner. Sobre él, que tuvo la imagen menos golpeada tras las protestas de octubre, el exvicepresidente de la República, Blasco Peñaherrera Padilla, considera que ha sido sensato.
Sonnenholzner, de su parte, negó que su nombre figure entre los potenciales candidatos para las elecciones de inicios de 2021.