Padres de menores desaparecidos en Guayaquil
Luis Arroyo y Katty Bustos observan con tristeza las fotografías de sus hijos, haciendo la actividad que más les gustaba: jugar fútbol.Freddy Rodriguez

Caso Malvinas | Padre de niño asesinado: "Estamos destrozados"

La reacción de los padres de los menores desaparecidos tras confirmarse que los cuerpos encontrados pertenecen a sus hijos

"Estamos destrozados. No tengo palabras. Siempre guardamos la esperanza de que estaban vivos. No tenemos fuerzas para nada", expresó Luis Arroyo, padre de dos de los cuatro menores que desaparecieron el pasado 8 de diciembre tras ser interceptados por militares.

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Luis, progenitor de Ismael, de 15 años, y Josué, de 14, relató este 1 de enero de 2025 a este Diario el profundo dolor que lo embarga al confirmar que los cuerpos encontrados en un recinto de Taura el 24 de diciembre pertenecen a los menores desaparecidos. Su voz, quebrada por la tristeza, refleja la tragedia que ahora enfrenta al recibir la noticia.

La Fiscalía General del Estado, mediante una publicación en redes sociales el 31 de diciembre, informó que las pruebas genéticas realizadas confirmaron que los cuerpos hallados en Taura corresponden a los tres adolescentes y al niño desaparecido tras un operativo militar.

Tras conocerse esta noticia, los padres de los menores acudieron al Laboratorio de Criminalística y Ciencias Forenses de Guayaquil. Sin embargo, los cuerpos no fueron retirados.

El pasado domingo 29 de diciembre, este Diario publicó un informe preliminar que destacaba las coincidencias entre los cuerpos hallados en Taura y las características de los menores desaparecidos. Un aparato dental perteneciente a uno de los menores y las huellas dactilares corroboraron esta tragedia, de acuerdo con una fuente.

Militares involucrados recibieron prisión preventiva

El martes 31 de diciembre también tuvo lugar la audiencia de formulación de cargos en contra de 16 militares presuntamente involucrados en la detención de los menores de edad. Los uniformados se enfrentan a acusaciones por el delito de desaparición forzada, un crimen que ha conmocionado a la sociedad ecuatoriana.

Esta tragedia ha dejado a las familias sumidas en el dolor y la incertidumbre, mientras exigen justicia y respuestas claras sobre lo ocurrido. "Lo único que queremos es que se haga justicia por nuestros hijos", concluyó Arroyo.

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