Sin certificacion no hay exportacion
El primer mes del acuerdo multipartes entre Ecuador y la Unión Europea (UE) tiene varias conclusiones. Por un lado los comerciantes de Guayaquil dicen, en un recorrido que se hizo en el centro de la ciudad, que con el Viejo Continente se vive una luna
El primer mes del acuerdo multipartes entre Ecuador y la Unión Europea (UE) tiene varias conclusiones. Por un lado los comerciantes de Guayaquil dicen, en un recorrido que se hizo en el centro de la ciudad, que con el Viejo Continente se vive una luna de miel. Incluso hay quienes indican que todo funciona como un reloj suizo, con puntualidad. Es la visión en cuanto a las importaciones.
Pero al preguntar por las exportaciones, los elogios desaparecen. Algunos empresarios señalan que no todos los pequeños productores han logrado exportar a Europa en este primer mes.
Santiago Cevallos, gerente de Indproagro, empresa que da valor agregado a la quinua, manifiesta a Diario EXPRESO que no todas las pequeñas empresas han podido mandar sus productos a territorio europeo.
Una de las razones es que requieren tener certificaciones que cuestan entre 15.000 y 30.000 dólares. Un monto que resulta caro para los pequeños empresarios, según Cevallos. Pone como ejemplo la certificación de que un producto es orgánico, solicitada por España para adquirir las barras energéticas de quinua.
Aunque se espera que el Gobierno ayude a quienes van a vender por primera vez a Europa, Cevallos destaca que Indproagro invirtió 250.000 dólares para contar con buenas prácticas manufactureras.
Las autoridades tienen su propia visión. Para el Ministerio de Comercio Exterior, desde ya hay pequeños productores que han hecho negocio con Europa. Un ejemplo es el centro de acopio Asoguabo, que queda en el cantón El Guabo. La agrupación exporta asociativamente, en promedio, 25.000 cajas de banano bajo el modelo de comercio justo.
El ministerio indica, a través de boletines, que se está trabajando arduamente para que todos puedan aprovechar el acuerdo con la UE. El ministro Juan Carlos Cassinelli estuvo en el cantón Pasaje, donde se reunió con la Asociación de Cacaoteros de El Progreso, con el objetivo de brindar acompañamiento en la búsqueda de nuevos mercados para su producción que cuenta con certificación orgánica y comercio justo, y que actualmente se exporta a través de empresas francesas.
Las primeras exportaciones e importaciones bajo la vigencia del acuerdo han llegado a sus respectivos puertos. Aunque los productos europeos que Ecuador compró todavía no llegan a las perchas con los precios rebajados.
En un recorrido por las principales licoreras del centro de la urbe, se vio que el whisky aún se vende con los precios que incluyen los aranceles. Por ejemplo, un Jhonny rojo todavía está a 50 dólares. Por el acuerdo en pocas semanas debe estar entre 25 y 30 dólares. Los dueños de las licoreras señalan que el cliente final ya pide el licor con el nuevo precio, pero no hay todavía. Lo que sí hay son ofertas para agotar rápido el stock del licor europeo.
En lo macroeconómico no se puede hacer un análisis cuantitativamente, pero sí cualitativamente, indica a EXPRESO el presidente de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), Daniel Legarda.
Agrega que las cifras de enero recién se conocerán en unos dos meses, más o menos. Para él, el verdadero análisis numérico se podrá efectuar en un año.
En cuanto a lo cualitativo, señala que para Fedexpor es positivo. Primero por las expectativas que ha significado para los empresarios. “Hay un sentimiento generalizado, en el sector productivo, de que el acuerdo es positivo”, dice.
Sobre todo para los sectores que ahora empiezan a recuperar competitividad, al pagar los mismos aranceles que otros países que son competencia. Un ejemplo de ello son los bananos. La fruta llegó a tener una diferencia de precio de un 20 % en comparación con el precio de otros países, como Colombia y Costa Rica. Otro sector beneficiado es el del camarón, que pagaba aranceles antes de la firma del acuerdo y ahora ya no.
Así, dependiendo de los sectores, el primer mes del acuerdo para unos es como una luna de miel y para otros es negativo, pues por falta de una certificación no pueden aprovecharlo.
“Al mercado europeo se insertarán 120 nuevos exportadores”
Este año, la labor de ProEcuador se duplica. Este es el ente encargado de promocionar las exportaciones del país y, por ende, se plantea el reto de que el país aproveche al máximo el acuerdo con la Unión Europea. Silvana Vallejo, su directora, dice que lo conseguirán con alianzas estratégicas, más ferias y programas comerciales.
Este año, la labor de ProEcuador se duplica. Este es el ente encargado de promocionar las exportaciones del país y, por ende, se plantea el reto de que el país aproveche al máximo el acuerdo con la Unión Europea. Silvana Vallejo, su directora, dice que lo conseguirán con alianzas estratégicas, más ferias y programas comerciales.
- Tras un mes de vigencia del acuerdo, ¿hacia dónde se apunta el trabajo?
- Este 2017 es muy importante para nosotros. Por ello, ya estamos trabajando en diferentes estrategias. Una de ellas es incrementar el número de ferias. Para este año tenemos previsto desarrollar 42 ferias internacionales, nueve más que el año pasado. Esto debido a que estamos implementando una estrategia agresiva para llegar al mercado europeo.
- ¿A qué mercados?
- Si hablamos de Europa, este año participaremos por primera vez en ferias como la TuttoFood de Italia para promocionar alimentos y bebidas, y en la Produce Show de Ámsterdam para dar a conocer nuestra oferta de frutas frescas. Adicional a ello estamos también trabajando en las misiones comerciales, en un programa que buscará que nuestros migrantes importen más productos ecuatorianos, en lograr que más empresas se inserten en el mercado de comercio justo, esto como un objetivo principal.
-¿Cómo lo conseguirán?
- Hace una semana acabamos de firmar un convenio con Copade, la Cooperación para el Desarrollo de Comercio Justo de España, que busca que más de 1.400 pequeños exportadores, bajo un proceso de asistencia técnica y capacitación, puedan insertar sus productos en este mercado. Van a ir bebidas de horchata, snaks, chocolates, quinua, barras energéticas que tendrán que cumplir con varios requisitos, como cuidar la naturaleza, tener responsabilidad social, contar una historia del producto; serán productos que hablarán de su cuidado, de su ética de exportación, de comercialización y precios justos.
- ¿Cuáles son las expectativas?
- De forma general, unos 2.500 productores están exportando al mercado europeo, pero 200 de ellos son pequeños. Nuestra meta es que más pequeñas empresas lleguen a este mercado. Tenemos un listado de 200 empresas a las que les falta poco para iniciar su proceso de internacionalización, a las que se les ayudará en el proceso de certificación, empaque, promoción. Nuestra aspiración es que en el transcurso del año al menos 20 empresas exporten. Pero a través del proyecto que tenemos con la delegación de la Unión Europea, la meta es tener entre 90 y 100 exportadores más.
- ¿Eso es poco o es mucho?
- Actualmente ya tenemos unos 200 exportadores, 120 viene a ser más del 50 %. Estamos hablando de un crecimiento importante de nuevos exportadores respecto a lo que hay en este momento. Ser exportador no se logra de la noche a la mañana.