Cinco países de Latinoamérica y el Caribe se oponen al aborto por violación
En la mayoría de estas naciones sus jefes de Estado defienden la vida desde la concepción y se oponen a la despenalización. En el caso de Ecuador, Guillermo Lasso ha anunciado un veto parcial a la ley
Guillermo Lasso, un presidente católico y creyente de que la vida se debe respetar desde la concepción hasta la muerte natural, no es el único primer mandatario en América Latina y el Caribe que no está de acuerdo con el aborto. Sin embargo, hoy ha anunciado un veto parcial al proyecto de Ley de Interrupción del Aborto en caso de Violación, aprobado por la Asamblea Nacional, el 17 de febrero de 2022. Lee los detalles aquí.
El presidente veta parcialmente la ley que interrumpe el embarazo en casos de violación
Leer másEn El Salvador, un país de Centroamérica con más de seis millones de habitantes, el aborto bajo cualquier aspecto es considerado un delito. Este país desde 2019 es liderado por el segundo mandatario más joven de la región, Nayib Bukele (40 años), quien se niega a comprender el avance en Derechos Humanos para las mujeres que quedan embarazadas a raíz de una violación y descartado cualquier intento para la despenalización.
Siete mujeres están encarceladas en El Salvador por supuestamente abortar
Leer másEn mayo de 2021, la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales de la Asamblea Legislativa de ese país -conformada por mayoría oficialista- decidió archivar un proyecto de Ley presentado en 2016 para despenalizar el aborto por cuatro causales. Mismo que es punible desde 1973 en todo aspecto.
En septiembre de ese mismo año el mandatario presentó reformas a las Constitución y tajantemente manifestó que no propondrá “ningún tipo de reforma a ningún artículo que tenga que ver con el derecho a la vida (desde el momento de la concepción), con el matrimonio (manteniendo únicamente el diseño original, un hombre y una mujer) o con la eutanasia”.
El Salvador, al igual que países como Haití, Honduras, Nicaragua y República Dominicana, el aborto es punible. En el caso de esta última nación, su mandatario Luis Abinader ha reconocido la necesidad de despenalizar dicha práctica bajo de tres causales, entre ellas por violación. El Congreso Nacional dominicano trata un nuevo Código Penal donde solo se incluye la despenalización en casos de que esté en riesgo la vida de la madre. Sin embargo, el jefe de Estado, ha manifestado que esperará al nuevo código para analizar su veto, sin descartar de acudir a un referéndum para que sea la ciudadanía que decidida sobre las causales para la interrupción del embarazo.
Entre tanto, en Colombia su primer mandatario, el presidente Iván Duque – que también se considera pro-vida- se opuso a la interrupción del embarazo hasta las 24 semanas aprobado por el Tribunal Constitucional con cincos votos a favor en febrero de este año. “Se está permitiendo que se pueda interrumpir sin ningún argumento hasta los casi seis meses de embarazo”, expresó en una entrevista. En este país el aborto estaba penalizado hasta con cuatro años y medio de prisión, pero en 2006 se permitía la interrupción del embarazo por tres causales: malformación del feto, riesgo de muerte en la madre o por violación.
Colombia ha sido el último país latinoamericano en sumarse a la llamada “marea verde”. No obstante, en Argentina desde el 2021 la interrupción gestacional no tiene causal y se puede realizar hasta las 14 semanas. En México está despenalizado por violación, pero previa autorización médica. Sin embargo, desde 2019 en el Estado de Oaxaca el aborto no es punible hasta 12 semanas. En Cuba y Uruguay también se permite hasta las 12 semanas, pero solo bajo ciertas causales, entre ellas por violación. Al igual que Chile y Brasil.