¿Por qué estas cinco parroquias quieren separarse de Quito para convertirse en un nuevo cantón?
Pifo, Tumbaco, Cumbayá, Nayón y Puembo aseguran que no se sienten atendidos por la Alcaldía. Sus cifras les permiten convertirse en un nuevo cantón
La inconformidad motiva el cambio. Representantes de los pobladores de cinco parroquias de Quito decidieron impulsar una iniciativa para separarse del Distrito Metropolitano y formar un nuevo cantón, el del Valle de Tumbaco.
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Leer másSon habitantes de Cumbayá, Pifo, Nayón, Puembo y Tumbaco. Ellos aseguran que cada año, estas parroquias aportan con 12 millones de dólares como pago del Impuesto Predial. Sin embargo, cuentan, ese dinero no regresa para obras en el sector.
Los avances que tienen esas parroquias, asegura Juan Fernando Serrano, presidente de la Junta Cívica del Valle de Tumbaco, responden a inversión privada en su mayoría. La presencia del gobierno seccional de Quito no se siente.
No son solo recursos. Serrano conversó con EXPRESO y afirmó que temas de seguridad, movilidad y atención ciudadana están descuidados en las cinco parroquias. Los habitantes de esos puntos no están conformes con el trabajo municipal.
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Leer másLa Junta sabe que el camino a la separación no será sencillo ni rápido. Para conseguirlo, deben cumplir una serie de requisitos establecidos en el Código Orgánico de Organización Territorial, Autonomía y Descentralización (Cootad). Además, como paso final, se debe realizar una consulta popular para que la población decida la salida o no.
Como primer paso, afirma la Junta, se inició una campaña de socialización con los moradores. Luego esperan la decisión de apoyo del Ejecutivo y de la Alcadía de Quito. Jorge Yunda, titular del gobierno municipal, explicó que se respetará la decisión de la población siempre que esté dentro del marco legal establecido.
Uno de los requisitos más importantes, sin embargo, ya está cubierto. Las cinco parroquias tienen más de 200.000 habitantes y para ser considerado un cantón se requieren de apenas 50.000 personas.
Dentro del Concejo Metropolitano de Quito hay voces en contra. Algunos concejeros creen que la solución no es la separación sino el trabajo conjunto para atender las necesidades de todos los quiteños.