La clase media, el sector de la población observado a conveniencia
Lo que la supuesta población media cree de sí misma no es lo que en realidad es. Varios académicos buscan perfilarla
En 2022, el expresidente Rafael Correa exponía al periodista Xavier Lasso que “muchas veces el éxito de la izquierda es su propio fracaso”, ya que “saca a la gente de la pobreza, crea una clase media y (…) no recibe el discurso de la izquierda (…), sino el discurso de la derecha”, lo que a su parecer los vuelve “pobres subjetivos, no objetivos”.
4,7 millones de personas pasaron de la clase media a la pobreza en América Latina, según el Banco Mundial
Leer másCon esta idea coincide Gustavo Petro, cuando era candidato a la Presidencia de Colombia. En 2021, le expresó a la escritora Carolina Sanín que “cuando los pobres dejan de ser pobres y tienen, entonces, se vuelven de derecha”. Ya en 2018, la política mexicana Yeidckol Polevnsky manifestaba que sacar de la pobreza a la gente significaba un “problema” para la izquierda porque “cuando llegan a ser clase media, se les olvida de dónde vienen y quién los sacó”. Por esto, Tareck El Aissami, exvicepresidente de Venezuela, en 2014, decía que “mientras el pueblo es más pobre es más leal al proyecto revolucionario”.
Muchos en Ecuador se consideran que forman parte de la famosa clase media, estrato social que en los últimos años ha sido objeto de análisis de algunos líderes políticos de izquierda y a su vez, a la que le ponen el ojo todos los gobiernos de turnos para que aporte más al fisco a través del aumento de su carga impositiva. Sin embargo, ¿cómo se define actualmente a la clase media y por qué tanto interés en ella?
Para el sociólogo y analista político Agustín Burbano de Lara, la clase media por definición es la que tiene cubiertas todas sus necesidades básicas y hasta más. No obstante, “aunque muchas personas en el país nos autopercibimos de clase media, lo cierto es que, si agarras una definición por ingresos, menos del 10 % de la población lo es”.
De acuerdo con las estimaciones del Banco Mundial, la clase media son aquellos que tienen una baja probabilidad de caer en la pobreza, pero no son ricos, en otras palabras, son los que ganan entre 12 y 81 dólares por día, expresadas en las paridades de poder adquisitivo (PPA) de 2017.
A criterio del antropólogo Florencio Delgado, docente e investigador de la Universidad San Francisco de Quito, en Ecuador no hay solo tres rangos socioeconómicos, sino que cada clase se bifurca en tres subniveles, es decir, hay clase alta alta, clase alta media y clase alta baja; lo mismo con los otros dos estratos. El problema, y los que han sido sujeto de observación, para los líderes de izquierda, son quienes ahora están en el segmento de la clase media baja, los que antes no eran clase media, indica el experto, ya que “saltar de una clase a otra también significa saltar valores, ya que los valores de la clase alta son diferentes a los de la media y estos, a su vez, a los de la baja”.
Entonces, a su juicio, el conflicto surge cuando, de alguna manera, se borran esas identidades particulares, cambia la forma de ver el mundo y las ideas por las que antes luchaban comienzan a no ser tan importantes. “No es que se han olvidado instantáneamente del pasado, sino que al que le tocó sufrir entiende, pero el hijo ya no”, explica Delgado. Por lo que cree que es algo normal que las nuevas generaciones, que no vivieron el país antes de 2006, crean que Ecuador siempre ha sido como es ahora.
La perspectiva de la realidad es la inmediatez y el éxito está relacionado con ello (sobre los cambios que experimentan las sociedades-nota de la redacción-)
La clase media se redujo en 1,1 millones por la crisis
Leer másA pesar de ello, para Burbano, es justo y legítimo que cualquier persona tenga ganas de tener una movilidad ascendente. Pero a su vez, se debe tener en cuenta que la clase media actual no es la misma de hace seis años atrás, expone la psicóloga y docente de la Universidad Tecnológica Ecotec, Sandy Torres.
Para ellos, asegura la docente, “la perspectiva de la realidad es de la inmediatez y el éxito está relacionado con ello”; además, de que no tienen una expectativa por el futuro. A su vez considera que, para los jóvenes de este círculo, el plan a largo plazo es una pérdida de tiempo en sí.
No obstante, expresa el sociólogo Burbano, cuando se analiza los estudios de opinión pública y se examinan los estratos de ingresos medios o bajos, se puede observar que la gente está empezando a ver la política como algo negativo, como algo que no sirve al bienestar común, que los conflictos que tenemos son entre los políticos y no se sienten beneficiados de la política. Es más, “sienten que el Estado se ha retirado de su vida cotidiana, en término de seguridad social, salud pública, becas, cupos de estudios universitarios”, añade.
Sin embargo, a criterio de Pablo Andrade, psicólogo, experto en Ciencias Políticas, catedrático e investigador de la Universidad Andina Simón Bolívar, “la supuesta clase media olvidadiza” a la que el exmandatario Rafael Correa una vez se refirió, en una entrevista con el periodista Xavier Lasso, el pasado 29 de agosto de 2022, “no existe, sino que es una ilusión que se crea para venderla a la sociedad en temporada de elecciones”, ya que no tiene punto de vista científico.
Aquellos que salieron del límite de la pobreza y que supuestamente son clase media, no lo son, insiste el experto en Ciencias Políticas; esta población fue detectada en la década pasada y ha sido denominada como “clase vulnerable”. Ellos no están en la pobreza ahora, pero tienen una alta probabilidad de retornar a ella ante la presencia de un ‘shock’ económico inesperado, sostiene Andrade. El Banco Mundial los define como aquellos que registran ganancias entre 6,85 y 14 dólares por día (en PPA 2017).
Casas vacias, causa de mala vecindad
Leer másAndrade señala que la clase media es el resultado de largos procesos de cambios económicos, sociales, políticos y culturales, que, en condiciones muy especiales se cristalizan como grupos sociales y se miran a sí mismos como clases, no son un hecho inevitable. “Si usamos de otra manera el término clase, lo que predomina son las ganas de una persona que dice que hay una clase y de que esta exista”, enfatiza.
David Aguirre, psicólogo y docente de la Universidad Casa Grande y de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil, apunta a que se analice al poder, porque “la ideología es una máscara”; al final, el mandatario rige sin un planteamiento ideológico y busca que sus poblaciones estén empobrecidas, que no se ilustren y que no puedan tener otro tipo de acercamiento al pensamiento o al poder. “Histórica y estructuralmente, lo que han querido los gobernantes es someter a la población” y lo hacen a través del encarecimiento del acceso a la educación, cultura, literatura, ferias de libros, y estos solo se los dirige a una población privilegiada, opina.
Al final, el ciudadano tiene que preguntarse: ¿qué es lo que persigue el gobierno local, sectorial o el central?, porque cada vez, sostiene Aguirre, “estas administraciones nos empobrecen más, porque nos han hecho creer la idea de que no debemos parar de trabajar porque entre más lo hagamos, mayor riqueza vamos a tener y por lo tanto más felices vamos a ser”.