EL CNE aprueba presupuesto electoral de $109 millones en medio de alertas y cuestionamientos
Consejeros piden a Contraloría estar atenta, sobre todo en el área de comunicación. Se reactivó la mayoría electoral para aprobar el documento
El Consejo Nacional Electoral (CNE) aprobó este 2 de marzo de 2022 un presupuesto de $ 109’344.945 para las elecciones seccionales y de los integrantes del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS) del 5 de febrero de 2023.
En un escueto resumen se informó que 69,1 millones de dólares irán para las actividades de la planta central del organismo electoral, en tanto que 40,2 millones serán destinados para las delegaciones provinciales.
Para los 38 debates que deben ser organizados en las jurisdicciones con más de 100 electores se destinarán 841.363 dólares, en la renovación del equipo informático se prevé invertir 4,6 millones de dólares, Fuerzas Armadas requerirán 7,7 millones de dólares para prestar su contingente y la Policía Nacional 3,2 millones de dólares.
Para la aprobación de este presupuesto volvió a operar la mayoría de las elecciones pasadas en el CNE. Votaron a favor la presidenta Diana Atamaint y los consejeros Esthela Acero y José Cabrera. Este último con algunos reparos y el anuncio de la creación de una veeduría.
Elena Nájera criticó varios tramos de la proyección presupuestaria y alertó a la Contraloría General del Estado para que se active y observe con detenimiento los contratos, especialmente en el área de comunicación del CNE.
Según la funcionaria, varias observaciones que habría hecho al documento no fueron atendidas y podrían significar un ahorro de hasta 12,1 millones de dólares.
En la misma línea se pronunció el vicepresidente Enrique Pita que, aunque reconoció que se acogieron sus observaciones sobre campañas de comunicación innecesarias, provocando un ahorro de hasta tres millones de dólares, esta área le sigue generando dudas.
También cuestionó los pedidos de contratación de personal con base a proyecciones sobre el número de electores, recintos electorales y Juntas Receptoras del Voto que no estarían bien calculadas.
Puso el ejemplo del área de tecnología que en el documento dice que requerirá la contratación de unos de 21 nuevos desarrolladores que se unirán a los 11 ya existentes, pero sin detallar exactamente qué funciones cumplirán los contratados, teniendo en cuenta que el CNE no desarrollará nuevos productos tecnológicos para esos comicios, sino que “parametrizará” los aplicativos existentes.
Pita calificó como “decepcionante” el trabajo ejecutado por algunas áreas y funcionarios específicos del organismo electoral y lamentó que la mayoría de la programación presupuestaria no se base en informes técnicos.
La presidenta Atamait aseguró que este trabajo fue ejecutado con sumo cuidado por las áreas técnicas y que el presupuesto “no está escrito en piedra”. Aspira, por ejemplo, que para cuando sean las elecciones se hayan retirado todas las restricciones sanitarias y ya no sea necesario la adquisición de los kits de bioseguridad ($ 346 mil).
Se comprometió a dar facilidad a todas las organizaciones políticas, entidades de la sociedad civil y a las consejerías electorales para que, a través de delegados, puedan hacer una veeduría de la ejecución de este presupuesto que debe ser presentado al Ministerio de Economía y Finanzas.
