Combustibles: más control para parar el contrabando, señalan los precandidatos
Petroecuador ha tenido millonarias pérdidas en 2024 por ‘pinchazos’ al poliducto. El narcotráfico y la minería ilegal inciden
En el 2020, la Unidad Nacional de Delitos Hidrocarburíficos de la Policía Judicial detectó 40 perforaciones en la red de poliductos. Cuatro años después, el contrabando de combustible se ha disparado, hasta registrar en este 2024, 320 perforaciones (ocho veces más).
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El combustible es usado como precursor para procesar la hoja de coca, por lo que es trasladado a Colombia, por los ríos. Además se usa en la minería ilegal e inclusive es adquirido por comercializadoras y estaciones de servicio. Eso detalla el oficial investigador, capitán Emmanuel Salazar, quien dice que buscan repotenciar la unidad para evitar llegar a los atentados que enfrentó Colombia en el Oleoducto Transandino, años atrás.
En Ecuador, los derivados del petróleo se mantienen subsidiados. Y el contrabando ha pasado de grupos pequeños a organizaciones criminales.
EXPRESO sigue con la serie de temas que preocupan al país, en busca de respuestas de los 16 candidatos presidenciales. Se les preguntó: ¿Qué alternativas contempla o qué política de Estado diseñaría para mitigar el contrabando de combustible?
Ocho de los 16 candidatos contestaron. Una vez más, el equipo del presidente Daniel Noboa, de ADN, quien busca la reelección, no contestó. Mientras que la comunicadora de Luisa González, de la Revolución Ciudadana, se ha excusado; en esta ocasión porque la candidata estaba fuera del país.
Los candidatos coinciden en señalar que se deben mejorar los controles. En todos los casos dicen que se requiere implementar tecnología. Asimismo, tres de los candidatos vuelven a poner sobre el tapete de discusión la necesidad de quitar el subsidio y focalizar mejor para quitarle el negocio a las mafias.
EXPRESO buscó a las asambleístas oficialistas para preguntarles sobre las recientes publicaciones sobre una nueva presunta red de tráfico de combustible, similar al caso Triple A. Sin embargo, nuestras llamadas y mensajes quedaron sin respuesta. 👉https://t.co/d2V54rHznp pic.twitter.com/VzWDmpGuid
— Diario Expreso (@Expresoec) October 1, 2024
Los aspirantes a Carondelet proponen soluciones al contrabando de combustible
Carlos Rabascall, de la ID, cree que el monitoreo de la comercialización y la focalización de los subsidios debe coordinarse entre los ministerios de Energía y Minas, de Economía, de Transporte y Obras Públicas; Telecomunicaciones, Agencia Nacional de Tránsito (ANT), Policía, Fiscalía y SRI, junto a las estaciones de servicio.
Por otro lado, los candidatos mencionan que hay que monitorear mejor, con cámaras y sensores, las estaciones de servicio (gasolineras). Juan Iván Cueva, de AMIGO, apunta la necesidad de que en lugares como Galápagos, “en donde se reporta un consumo desproporcionado, se intensifiquen los controles y auditen constantemente los registros de consumo, para evitar el tráfico ilegal”.
El problema es complejo en Ecuador y está atado a otros aspectos colaterales: narcotráfico y minería ilegal. “Hay un robo gigantesco al Estado, con los pinchazos”, opina Ivo Rosero, presidente de la Cámara de Distribuidores de Derivados de Petróleo. El gremio agrupa a 1.200 estaciones de servicio, “la mitad en una situación insostenible, por el margen de ganancia, que rige desde hace 21 años”.
Desde hace varios años, recuerda Rosero, ya se expropiaron todas las estaciones fronterizas para reducir el contrabando. Pese a eso, el gremio cree que no hay resultados. Y ahora Petroecuador está a cargo. Por eso le parece que hay que controlar lo que sigue pasando: captura de tanqueros, que salen de beaterios o refinerías, sin guías.
“Entonces hay un problema interno o cómo sale un tanquero cargado con 10.000 galones sin guías”, pregunta.
En la Unidad de Delitos Hidrocarburíficos de la Policía hay 52 policías encargados de seguirle la pista a todo lo que está alrededor del contrabando de combustible. Aunque en ocasiones tienen que trabajar también en casos de extorsión.
Consultado, Salazar comenta que inicialmente quienes hacían perforaciones en esta tubería arriesgaban su vida. Actualmente, los delincuentes demuestran conocimientos técnicos y que han aprendido a usar herramientas como mangueras de alta presión y acoples.
Desde el 1 de enero hasta el 28 de septiembre de este año, la Unidad de Delitos Hidrocarburíficos registra 280 operativos, en los que han desarticulado a 37 organizaciones (con más de tres personas involucradas).
Los reportes policiales indican que hay 309 personas detenidas, así como 258 vehículos que transportaban ilegalmente combustibles. Se han aprehendido 522.290 galones.
En relación con el 2023, las cifras han aumentado. Así, el año anterior, la Policía dio con 414.700 galones, 192 vehículos.
En este 2024, la cantidad de combustible sustraído en las perforaciones ya ha dejado una pérdida de 20’600.000 dólares. A eso se suma el costo de los daños en la tubería nacional, que ya alcanza los cuatro millones de dólares.
Las investigaciones demuestran, según el capitán Salazar, que múltiples estaciones de servicio, en Sierra y Amazonía, pero más que nada en el Litoral, acceden al combustible, producto de perforaciones. La red nacional del poliducto, por el que corre el diésel premium, pasa por Santo Domingo, Los Ríos, Guayas, Manabí y por una parte del Austro.
Para Ivo Rosero hay que liberalizar los precios de los combustibles para cortar de raíz el problema, como sucede en el resto de América, menos Venezuela y Bolivia.
“Entendemos que es mucho más complejo con el diésel. Este Gobierno ha preferido no tocarlo, ya que es político y podría desatar un estallido social. En la época de (Lenín) Moreno y (Guillermo) Lasso se continuó con la política de gradualismo y se fue ajustando a raíz de cinco centavos por galón y subió de 1.03 a 1.79. Es el camino, obviamente aplicando focalización o compensación”.
Otra dificultad es la sentencia de la CAN, que obliga a vender al mismo precio el combustible ecuatoriano a los transportistas peruanos. “Los camiones de otros países vecinos pueden venir, llevarse hasta 600 galones, pasar 10 veces al día”.
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