Una comision analiza el papel de las mujeres
El papa Francisco nombró ayer una comisión para estudiar la posibilidad de permitir que las mujeres sean diaconisas, una cuestión que divide a la Iglesia y que supondría un giro histórico para la institución.
El papa Francisco nombró ayer una comisión para estudiar la posibilidad de permitir que las mujeres sean diaconisas, una cuestión que divide a la Iglesia y que supondría un giro histórico para la institución.
Los diáconos son el primer peldaño de la jerarquía católica y aunque pueden pronunciar sermones durante la misa y oficiar bautizos, bodas y funerales, no están autorizados a celebrar la eucaristía o a confesar a los fieles, como es el caso de los sacerdotes.
Según el Vaticano, la comisión, compuesta por 13 personas (entre ellas seis mujeres), estudiará en especial el papel de las mujeres que ejercieron esta función durante “los primeros tiempos” de la Iglesia Católica, pero hay también quienes esperan recomendaciones sobre cómo dar a las mujeres mayor protagonismo en la actualidad.
El pontífice argentino, interrogado en mayo sobre el diaconato femenino en un encuentro con superiores generales de congregaciones religiosas, se declaró a favor de la creación de una comisión para estudiar esa posibilidad.
Sus declaraciones crearon una viva discusión en el seno de la Iglesia, donde el acceso de las mujeres a ciertas responsabilidades sigue siendo un tema tabú.
“Creo que habrá un debate feroz. Sobre este tema, la Iglesia está dividida”, advirtió el cardenal Walter Kasper, teólogo alemán cercano al papa.
Sin embargo, en el avión de regreso de Armenia a finales de junio, el papa trató de calmar los ánimos asegurando que los medios habían deformado sus palabras evocando un posible acceso de las mujeres al diaconato en su forma actual. Esa “no es la verdad”, insistía entonces Francisco.