¿Qué se conmemora el 5 de junio en Ecuador?
El líder más destacado de la Revolución Liberal fue el general Eloy Alfaro
Este miércoles 5 de junio se recuerda un año más de la Revolución Liberal en Ecuador, un movimiento político y social que tuvo lugar a fines del siglo XIX y principios del siglo XX (1895 a 1912).
La Revolución Liberal fue un período de cambio significativo en la historia ecuatoriana que buscaba reformar el sistema político, económico y social del país, inspirado en ideas liberales.
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Este proceso dio inicio el 5 de junio de 1895 y tuvo como principal líder al general Eloy Alfaro, conocido como el 'Viejo Luchador'. Esta es una de las fechas más importantes para nuestra historia en donde se logró grandes conquistas como el registro civil, el laicismo, el voto femenino y, además, la terminación del ferrocarril Guayaquil-Quito.
El 5 de junio de 1895, durante la Revolución Liberal, se designó a Alfaro como jefe supremo de Ecuador en su ausencia, según lo señala el historiador Enrique Ayala Mora. Este evento marcó el inicio de una serie de transformaciones en el país.
El liberalismo ecuatoriano, bajo el liderazgo de Alfaro, instauró la Constitución alfarista. Esta carta magna, entre otros aspectos, garantizó la libertad de religión, estableció la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley y abolió la pena de muerte.
En 1897, se impulsó el laicismo en la educación con la aprobación de la Ley de Instrucción Pública, que colocó la enseñanza bajo la supervisión estatal. Posteriormente, en 1902, se promulgó la Ley de Matrimonio Civil, que permitió el divorcio y legalizó los matrimonios civiles.
Estas reformas, lideradas por Alfaro, representaron un cambio significativo en la ideología ecuatoriana. Entre los cambios más destacados se encuentran la separación entre la Iglesia Católica y el Estado, la participación de las mujeres en la esfera pública, la promoción de una educación laica y la construcción del ferrocarril que conecta Quito y Guayaquil.
Eloy Alfaro fue brutalmente asesinado el 28 de enero de 1912. Había sido derrocado del poder en 1906 y exiliado, pero en 1911 lideró una insurrección para intentar recuperar el control político. Sin embargo, fue capturado junto con varios de sus seguidores en la ciudad de Montecristi.
Fueron trasladados a Quito, donde fueron sometidos a un juicio sumario. Alfaro, junto con otros líderes del movimiento, fue ejecutado mediante linchamiento público. Fue arrastrado por las calles de la ciudad, golpeado, y finalmente linchado junto con sus compañeros en el Parque El Ejido de Quito. Este acontecimiento trágico marcó el final de una era política en Ecuador y dejó una profunda huella en la historia del país.
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