Un Consejo cauto es el contrapeso de Morales

La determinación frente a la cautela. La decisión de 15 alcaldes del Partido Social Cristiano (PSC) de impulsar la destitución del prefecto del Guayas, Carlos Luis Morales, a quien apoyaron en las elecciones seccionales de 2019, ejerce presión en el resto de consejeros provinciales, pero no la suficiente como para, luego de cuatro días de anunciada la posición, aglutinar más voces a favor de ella. La cautela, en este momento, juega como contrapeso a favor del prefecto.

Diez alcaldes que no responden a la línea partidista socialcristiana y siete delegados de las 29 Juntas Parroquiales de la provincia que sí fueron electos en representación de esa tienda política (es decir 17 votos en el Consejo Provincial) se inclinan por la prudencia.

Rina Correa, integrante de la Junta Parroquial de Los Lojas en Daule, electa por el PSC y consejera provincial, es de las que quiere escuchar todas las posturas para tomar una decisión que adelanta, por el momento, no será partidista. “Si Carlos Luis Morales tiene que responder por algo, que lo haga. Se nos hace difícil porque en el momento de pandemia fue la única institución de la que recibimos ayuda. Me llegaron 1.000 raciones, amonio cuaternario, fumigación, agua a los recintos. Quiero que me entienda. Es difícil”, acotó la consejera, quien precisó que la postura de los siete delegados dependerá de la decisión de los 29 presidentes de las Juntas Parroquiales de la provincia.

El alcalde de Playas y también consejero provincial, Dany Mite (CREO), ciñe su posición al proceso legal que reglamenta la destitución del ejecutivo provincial. Espera que la Comisión de Mesa, integrada por el prefecto y los alcaldes Francisco Asán y Ángela Herrera (ambos del PSC), determine la existencia o no de causales para su destitución y con ello adoptar una posición. “Puede suceder que el votar por una destitución, de ser el caso, y no hay una sentencia, el prefecto puede quejarse ante el Tribunal Contencioso Electoral o podemos infringir en un problema que no es nuestro. Mi postura actual es en contra de lo que perjudica al erario provincial”.

Su par de Bucay y consejero provincial, Gregorio Rodríguez (Podemos), adopta una postura similar de cautela con la mira puesta en el proceso judicial y en el interno solicitado por el bloque de alcaldes socialcristianos. “Me han preguntado:_¿está a favor o en contra de la destitución? No puedo estar a favor o en contra si no tengo elementos de evaluación. Estoy a favor de que se transparente y se inicie el proceso interno. Y si ese proceso nos sugiere que debe haber una destitución, pues vamos a la votación en el pleno”.

El grupo de delegados de las Juntas Parroquiales ante el Consejo Provincial tenía previsto reunirse ayer con la dirigencia socialcristiana para adoptar una postura. En el caso que el partido logre adherir esos siete votos a la tesis de destitución, sumarían 22, las dos terceras partes del Consejo necesarias para la destitución.