Consenso en los partidos para una nueva fecha de la elección
Piden que los comicios de 2021 sean en el primero o segundo domingo de marzo. También hay acuerdo por descartar el voto electrónico y telemático
De tendencias políticas opuestas, pero en esta ocasión con posturas iguales. Como si se hubieran puesto de acuerdo, la mayoría de organizaciones políticas nacionales del país llegó con un planteamiento al I Consejo Consultivo Nacional convocado por el Consejo Nacional Electoral (CNE) con miras a las elecciones de 2021: mover la fecha de la votación. Un tema que no estaba en el borrador del orden del día, pero que por propuesta de los delegados de la Izquierda Democrática, pasando por el del Partido Social Cristiano, hasta el Partido Socialista, llegando a Sociedad Patriótica y otros, logró colarse en el debate.
Pasó a ser el primer punto en discusión de un Consejo Consultivo que empezó media hora tarde y que logró aprobar el orden del día más de una hora después de iniciado. Esto provocó algunas quejas de los delegados que pidieron que en próximas ocasiones se simplifique el proceso interno para economizar tiempo. Además, las dificultades propias de la época que los obliga a reunirse desde la distancia no se acerca al diálogo cara a cara al que están acostumbrados los políticos.
Sin todavía abrir el debate, sale a relucir una propuesta de nueva fecha para reemplazar al 7 de febrero de 2021, día aprobado por el Consejo Nacional Electoral para la elección de binomio presidencial, asambleístas y parlamentarios andinos. Geovanni Atarihuana, director nacional del movimiento Unidad Popular, fue el que lanzó el planteamiento: el 7 de marzo de 2021. Luego de varias voces que pidieron la palabra para incluir el tema en el orden del día, esto fue aprobado por los delegados de los partidos y movimiento políticos.
Si dicen que el calendario aprobado antes de la pandemia no se puede cambiar, no hemos entendido la gravedad.
La exposición empezó con la presentación del calendario electoral aprobado, seguido de un cronograma alternativo redactado por los despachos de los consejeros de minoría, Enrique Pita y Luis Verdesoto. Esta propuesta mueve la fecha de las elecciones al 21 de febrero para la primera vuelta y el 18 de abril para una eventual segunda vuelta electoral. No convenció a los dirigentes políticos. “Se puede hacer un esfuerzo para llevar las elecciones al mes de marzo”, insistió el representante del movimiento Democracia Sí, Gustavo Larrea, lo que fue secundado por el delegado del Partido Social Cristiano, Alfredo Serrano.
Si se puede hacer esfuerzo para llevar la elección a marzo sería muy positivo para la democracia.
El principal argumento de las organizaciones políticas para solicitar la modificación es que la pandemia paralizó todas las actividades incluidas las de ellos como preparación para los comicios. Además, que realizar elecciones primarias en las 24 provincias y en el exterior para elegir candidatos a binomio presidencial, legisladores y parlamentarios andinos en 15 días, tal como lo contempla el actual cronograma, les parece poco tiempo. “Necesitamos al menos un mes”, acotó Gilmar Gutiérrez, presidente nacional del Partido Sociedad Patriótica.
Apoyamos el calendario ya aprobado por el CNE. Si existe uno es porque se garantiza la posesión.
La voz casi unánime sugería al CNE que modifique el calendario y traslade la fecha al 7 o 14 de marzo próximos. Pero desde el otro lado de la orilla, el consejero electoral José Cabrera defendió el calendario aprobado y dijo que lo que quieren es evitar que suceda lo que pasó en 2019, que por recursos represados ante el Tribunal Contencioso Electoral algunas autoridades no pudieron posesionarse en la fecha establecida por la normativa.
Es el CNE el que deberá decidir si modifica o no el calendario, así como adoptar una metodología de votación en medio de la pandemia. La voz de mayoría rechazó el voto electrónico y telemático. Se inclinó más por dividir la votación en varios días y con horarios de votación dependiendo de la vulnerabilidad de las personas frente al nuevo virus. Las sugerencias están sobre la mesa.
