El Covid-19 postergó nuevos cargos a Bucaram y su hijo Jacobo
La defensa del expresidente se excusó de ir a diligencia por contagio de COVID-19. La Fiscalía lo investiga por piezas arqueológicas
La Fiscalía General del Estado (FGE) busca determinar a quién pertenecen 3 de 22 piezas arqueológicas que fueron encontradas en el domicilio del expresidente de la República Abdalá Bucaram Ortiz.
Aunque estaban en su vivienda, en la ciudadela Kennedy de Guayaquil, el exmandatario no ha logrado justificar cómo las obtuvo, quién se las dio, ni desde cuándo las tiene.
Ayer, la Fiscalía tenía previsto formular cargos en contra del expresidente y su hijo Jacobo Bucaram Pulley, por el presunto delito de transporte, comercialización y tráfico de bienes culturales, sancionado con una pena de 5 a 10 años de cárcel. Pero la diligencia fue pospuesta por el juez Juan Carlos Terán Moreno, de la Unidad Judicial Norte Penal Nº 1. La defensa del exmandatario presentó un certificado positivo para COVID-19.
El fiscal César Suárez Pilay, de la Unidad 3 de Administración Pública de la Fiscalía del Guayas, manifestó que el nuevo expediente se derivó de una pericia realizada por el Instituto Nacional Ecuatoriano de Patrimonio Cultural, y que se dispuso a los objetos encontrados en el domicilio de Bucaram, el pasado 3 de junio.
Esto, dentro de una investigación que se realiza por presunto peculado, que indaga además la procedencia de un cargamento de mascarillas que se decomisaron en su casa, idénticas a las que adquirió con aparente sobreprecio el hospital Teodoro Maldonado Carbo del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), por el coronavirus. Ese día también hallaron un arma de fuego y municiones, lo que generó un proceso por el delito de tráfico de armas, por el que fue llamado a juicio.
“El objeto de la pericia era determinar la autenticidad de dichas vasijas, teniendo como resultado que tres de ellas son originales. Es entonces que se adecúa una conducta penal en la cual la Fiscalía ha solicitado audiencia de formulación de cargos”, dijo el fiscal, al añadir que no se ha podido determinar todavía si esas piezas ancestrales son las que desaparecieron de Carondelet, por lo que se ha dispuesto que se trate de ubicar a qué cultura o a qué institución pertenecen.
El funcionario ilustró que dentro de la normativa y tratados internacionales está prohibido la comercialización de ese tipo de arqueología y que el dominio de las mismas solo lo tiene el Estado, lo que es inalienable e intransferible.
EL DETALLE
Versión. La Fiscalía convocó para las 10:00 de hoy, a Bucaram y su hijo Jacobo a rendir versión para que puedan decir por qué tenían en su poder esas vasijas.