Cuatro tiros perforaron el cuerpo del niño asesinado en una heladería de Guayaquil

Con su voz entrecortada y sus ojos hinchados por tanto llorar, Tomás Obando, relató como ocurrió el hecho que acabó con la vida del mayor de sus dos hijos.

"Salimos a pasear con mi esposa y mis hijos. Fuimos a una heladería. Cuando llegó un delincuente y se dio el cruce de balas con un policía que se encontraba en el lugar. A mi niña la alcancé a tirar al piso, pero mi niño corrió y en ese momento resultó herido, recibió cuatro impactos de bala", contó el padre.

Pero a más del profundo dolor que le causa por haber pedido a su niño de 11 años, el padre pide a las autoridades que se haga justicia y que no solo se detenga al delincuente, sino que también se sancione al uniformado que según él habría actuado de forma negligente.

"Entiendo la labor de los Policías, pero lo de él (agente) fue una impericia, no debió haber disparado, nos puso en riesgo y mi hijo resultó muerto", agregó.

Joselito Argüello, abogado que representa a los familiares de la víctima indicó que al parecer existió negligencia por parte del policía, ya que se encontraba en un lugar cerrado y no debió enfrentarse al delincuente.

"Repudiamos el accionar de la Policía y de la Fiscalía. El padre no tuvo la colaboración necesaria. Considero que el policía no hizo lo correcto. Vamos a plantear una acción penal en su contra, él tendrá que responder por un homicidio. También presentáremos una denuncia en contra de la ministra de Gobierno y en contra de los máximos directivos de la Policía Nacional", señaló el abogado Argüello.

A través de su cuenta de Twitter la Gobernación del Guayas emitió un comunicado en que se solidariza con los familiares del niño asesinado y en el que además indica que junto a la Policía Nacional agilizan los procesos para la captura del responsable.