El décimo femicidio en cuarentena ocurrió en el norte de Guayaquil
El atacante se despidió de su hijastra por teléfono antes de acuchillar a su expareja y después suicidarse
El décimo femicidio, durante el confinamiento en casa por la pandemia del coronavirus, se cometió el miércoles en la cooperativa Los Comandos, en el sector de La Florida, en el norte de Guayaquil. El crimen ocurrió en la casa que meses antes Luis Alfredo Avilés Juez, de 34 años, compartía con María Isabel Baidal, de 35. Ambos se habían jurado amor eterno hasta que empezaron los conflictos y las peleas, que los llevaron a separarse.
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Rosa Zambrano, quien se identificó como hermana de la fallecida, dijo a la Policía que los vecinos de María Isabel la llamaron a las 12:40 de ayer para informales que su hermana estaba discutiendo a los gritos con Luis Alfredo. El barrio estaba alarmado por las constantes peleas de la expareja, pues temían que en cualquier momento terminara en tragedia.
En el informe policial, Rosa señala que ella acudió de inmediato hasta la casa de María y que al llegar al sitio se encontró con la macabra escena: su hermana estaba sin vida, con varias heridas de puñal, dentro de un charco de sangre, y su excuñado tenía un cuchillo incrustado a la altura de la tráquea.
La mujer asegura que su excuñado, en repetidas ocasiones, había tenido problemas con su hermana y por eso ella decidió separarse. A pesar de los intentos de alejarse, él la perseguía y se le presentaba en la casa en cualquier momento. Por lo expuesto por los vecinos y los familiares de la mujer, los agentes de Policía investigan la hipótesis de femicidio y posterior intento de suicidio.
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Leer másUna hija de la fallecida también contó a los investigadores que su padrastro (Luis) la llamó aproximadamente a la 23:50 del miércoles para decirle que cuidara a su hermano y que los quería muchos a los dos. Además, le había dicho que él estaba muy triste porque la nueva pareja de su progenitora se había metido en sus vidas para destruirlas.
Según la joven, ella cortó la llamada y pensó lo peor. Como pudo y con temor a ser detenida por el toque de queda que rige desde las 14:00 hasta las 05:00, ella llegó hasta la casa de su madre, pero al igual que su tía materna, quien lo hizo más tarde, se encontró con la escena de que ambos estaban ensangrentados en el piso. Durante la riña, que todos los vecinos escucharon, su mamá había llevado la peor parte.
La gestora de comunicación del Centro Ecuatoriano para la Promoción y Acción de la Mujer (Cepam) Guayaquil, Nadya Donoso, señaló que este tipo de delitos ocurre porque en algunos casos los hombres sienten el derecho erróneo de propiedad ante las féminas y se niegan a aceptar que tienen derecho a rehacer sus vidas con otra persona.
“En muchas ocasiones los hombres no aceptan que la mujer termine con la relación amorosa. Por eso invitamos a las víctimas de violencia de género a que denuncien las agresiones ante las autoridades competentes para que reciban protección”, señaló Donoso.
Dieciocho decesos en cinco meses
En lo que va del año, un total de 18 mujeres han sido asesinadas en el país por sus parejas o exconvivientes, en diversas circunstancias. De ellas, diez durante los casi dos meses de cuarentena.
La cifra de la Fiscalía contrasta con la que registra el Cepam, que asegura que son 34 decesos, 11 de ellos durante el confinamiento. El número de víctimas en estos primeros cinco meses del año es menor a igual periodo del año pasado, pero aquello no significa que exista menos violencia.