La defensa de Rafael Correa espera tercera negativa de Interpol

Ahora que existe una sentencia condenatoria ejecutoriada en firme, Interpol podría emitir una difusión roja en contra del expresidente Rafael Correa, reconoce su defensa. Sin embargo, guardando coherencia con sus decisiones que han sido apegadas a sus normas internas de funcionamiento, seguramente no lo hará, señala Carlos Alvear.

El martes, el juez Iván León, presidente del tribunal de ejecución de la sentencia en el caso Sobornos 2012-2016, dispuso se oficie a la Oficina Central Nacional de Interpol (OCNI) de Quito para la difusión roja del expresidente y otras 14 personas sentenciadas a ocho años por cohecho agravado.

Correa reside en Bélgica desde 2017 que dejó el poder en manos de su coideario Lenín Moreno. Interpol ya negó en al menos dos ocasiones la posibilidad de incluir a Rafael Correa en la lista de personas con difusión roja.

Y Alvear explica que eso ocurrió porque “las políticas de la Interpol rechazan categóricamente que la institución pueda ser utilizada como herramienta de persecución al servicio de los Estados y de las coyunturas que atraviesan los mismos”.

El defensor dice que las negativas fueron porque ese organismo consideró que los motivos “eran procesos judiciales instaurados como retaliación política en su contra”.

Según Alvear, organizaciones internacionales imparciales concluyeron que en contra de su cliente y sus principales funcionarios existe una persecución judicial sistemática por su posición política en Ecuador.

Alfonso Zambrano, otro de los abogados de Correa, opina que el proceso y el procedimiento están desprestigiados y por eso esa instancia ha negado pedidos previos. Él prefiere esperar cualquier respuesta.

Actualmente hay unas 62.000 notificaciones rojas válidas registradas por la Policía Internacional. De ellas, solo en 2019 se emitieron 13.377. Alrededor de 7.000 son de acceso público.

Las notificaciones rojas son parte de las ocho clases que registra Interpol. Se utilizan para localizar y detener a personas buscadas con miras a su enjuiciamiento o para cumplir condena, señala la página web del organismo.

Además de las rojas existen amarillas, que se usan para buscar personas desaparecidas, frecuentemente menores, azules que se orientan a recoger información adicional sobre la identidad de una persona, ubicación o actividades con relación a un delito.

Hay también negras para conseguir información sobre cadáveres sin identificar, verdes para alertar sobre las actividades delictivas de una persona, naranjas para alertar de un acontecimiento, una persona, un objeto o un procedimiento que supongan un peligro grave e inminente para la seguridad pública.

Las moradas sirven para buscar o facilitar información sobre modus operandi, objetos, dispositivos y métodos de ocultación utilizados por los delincuentes y las especiales para informar sobre personas o grupos objeto de sanciones impuestas por Naciones Unidas.

¿Para quién va la notificación roja? Es para fugitivos buscados para su enjuiciamiento o para cumplir condena. Antes de publicar la notificación un grupo especializado verifica las solicitudes.

Interpol es clara en que no se publicará una notificación si es que incumple el artículo 3 de su estatuto que “prohíbe a la organización emprender ninguna intervención ni actividad de carácter político, militar, religioso o racial”.

Difusión roja

Sirve para la detención de personas

Interpol tiene entre sus miembros a 194 países del mundo. La difusión roja sirve para conseguir la detención de una persona con fines de extradición, previo el cumplimiento de requisitos estipulados en el Reglamento de Tratamiento de Datos (RTD) del organismo.

Interpol es clara en que cualquier persona objeto de una notificación “debería ser considerada inocente hasta que se pruebe su culpabilidad”.