La desaparición de Bernal se convirtió en un femicidio

Una cobija manchada con sangre fue la pieza clave para dar con el paradero de María Belén Bernal, la abogada desaparecida el pasado 11 de septiembre de la Escuela de Policía Alberto Enríquez Gallo.

Su rastro se perdió luego de que ingresara a ese centro de formación de oficiales para ver a su esposo Germán Cáceres, instructor de cadetes.

A las 10:00 de este miércoles los bomberos encontraron esta evidencia en el cerro Casitagua, ubicado a 15 minutos en vehículo desde la Escuela Superior de la Policía de Pusuquí.

A pocos metros de la cobija estaban unas fundas plásticas y unos metros más allá, un cuerpo femenino en estado de descomposición envuelto en en fundas.

Desde ese momento hubo un movimiento continuo de vehículos, que advertía que algo ocurría. Un helicóptero daba vueltas en el aire. Carros oficiales, camionetas, motos y jeeps todo terreno subían y bajaban por un camino de segundo orden, unas partes lastrado y en otras partes empedrado.

La noche que desapareció María Belén Bernal, su esposo Germán Cáceres, actualmente prófugo, seguramente tuvo que conducir en medio de la oscuridad para deshacerse del cuerpo, ya que el camino no cuenta con alumbrado público. Tampoco tiene señalética.

Pasado el mediodía, luego de que la Fiscalía confirmara la presencia de “restos óseos” en ese cerro, llegaron los familiares de María Belén Bernal. Su madre, Elizabeth Otavalo, cambió completamente el rostro cuando tuvo que identificar al cuerpo, el tatuaje y las prendas de vestir, que eran las de su hija. 

El abogado Jesús López informó que se trataba de Bernal y minutos después el presidente Guillermo Lasso y el ministro del Interior, Patricio Carrillo, confirmaron la noticia y expresaron sus condolencias a la mamá de María Belén y al hijo que deja. 

En una rueda de prensa en la Escuela Superior, el ministro Carrillo dijo que: “De rodillas pedimos perdón”. Ofreció nuevamente que hallarán a Cáceres, aunque sea debajo de las piedras.

Anunció que pedirá que se elabore un informe y se solicite la vinculación de todos los uniformados que están en procesos administrativos y que para ellos también se pida la prisión.

Elizabeth Otavalo quiere el apoyo de entidades independientes para descubrir la verdad. Todavía no se conoce la causa de la muerte. Una autopsia legal, que será efectuada por personal civil, está a cargo del procedimiento.

El hallazgo del cuerpo cambia la situación legal del caso de María Belén Bernal, que comenzó como una desaparición involuntaria y ahora apuntará a un proceso por el delito de femicidio.

Mientras tanto, la Fiscalía se alista para presentar cargos en contra del teniente Cáceres, prófugo de la justicia. La audiencia ha sido convocada para mañana, a las 15:30, en la Casa de Justicia de Carcelén, norte de Quito.

La primera vez que la Fiscalía conoció del caso no presentó cargos porque supuestamente no había suficientes elementos de convicción. Estuvo retenido ocho horas y fue liberado a pesar del pedido para que se formulen cargos, según indicó el comandante de la Policía, Fausto Salinas.

Ahora, tras haber encontrado sangre en el auto de su esposo y las pertenencias de la mujer en varios sitios de la Escuela Superior, el fiscal Geovanny García formalizará la imputación. Esta vinculación se sustentará también en versiones de cadetes y oficiales de la Policía, quienes estuvieron presentes la noche que desapareció Bernal.

Ellos refirieron haber escuchado gritos y una pelea en la habitación del teniente Cáceres. Otros hablaron de haber visto al oficial cargando un bulto. Otra pista en el caso se halló el miércoles en la casa de la madre del oficial, ubicada en Ambato. Según la Fiscalía, en el domicilio de la madre “se incautó el DVR de las cámaras de seguridad y en la vivienda del padre, computadoras y una flash memory”.

Análisis

Los restos de la abogada María Belén Bernal serán sometidos a análisis de rayos X, dactiloscopía, examen de ADN y odontología forense.

Acciones

Entre los próximos pasos en la investigación está la búsqueda de Cáceres. Las pistas en análisis son las llamadas telefónicas y desde qué localidades se hicieron.

Comunicación

Según la defensa de la familia de María Belén Bernal, el subteniente mantuvo contacto con sus padres hasta el martes 13 de septiembre.