Detienen a una mujer acusada de extorsión
Se la implica como líder de un grupo criminal que actuaba en el sur de Guayaquil. Las víctimas eran los dueños de negocios
Según varias denuncias, Lizeth Castillo Barreiro se había convertido en el terror de los comerciantes y tricimoteros de Las Malvinas.
La mujer, al parecer, lideraba una banda criminal que amedrentaba y extorsionaba a los dueños de los locales de este sector del sur de Guayaquil, según informó un oficial de la Unidad Antisecuestros y Extorsión (Unase) de la Policía.
El investigador afirma que la pichinchana, de 31 años, conocida con el alias de Diabla, no solo atemorizaba a los comerciantes, sino también a los conductores de tricimotos, a quienes les exigía entre 100 y 500 dólares para no atentar en contra de ellos.
Los 'vacunadores' usaron una dinamita para intimidar a una ferretería en Guayaquil
Leer másCastillo fue detenida la noche del lunes 26 de septiembre de 2022 tras un operativo realizado en la cooperativa Esmeraldas Chiquito, en el sur de la ciudad. Junto a ella ‘cayó’ uno de sus compinches, Luis Morán Gilse. Ambos fueron aprehendidos en flagrancia.
“La Diabla pertenece a Los Lagartos. Su conviviente está en la cárcel. Esta mujer está al mando de una agrupación integrada por al menos 15 personas, quienes extorsionan a los propietarios de locales comerciales y tiendas”, explica el agente de la Unase.
La banda de la Diabla tiene tres meses amedrentando a los propietarios de los negocios, a quienes les advertía que de no acceder a sus requerimientos económicos, dispararían o colocarían artefactos explosivos en sus locales o en sus viviendas.
“En algunos casos pedían como entrada $ 5.000 y de ahí pagos de $ 500 mensuales. Enviaban mensajes de WhatsApp con la advertencia: ‘no pagas, te mando a disparar la casa’. Una de las víctimas pagó cuatro veces los valores exigidos, pero al no contar con el dinero para pagar la siguiente cuota se decidió a denunciar”, indica el oficial.
Un hombre se negó a pagar la extorsión y se la cobraron con la vida
Leer másEn el celular de Castillo, quien ya registra un proceso judicial por asesinato, se hallaron evidencias que la involucran en el delito de extorsión. “La gente se deja amedrentar y paga y esto se vuelve una cadena. No tengan temor y denuncien, es la única forma de poner un alto a estos delincuentes”, recomienda el agente.
En la audiencia de formulación de cargos realizada la tarde del martes 27 de septiembre, a los dos detenidos se les ordenó prisión preventiva por el delito de extorsión.