Dilemas: la herencia del sillón municipal en Quito
En Quito, la inseguridad y la movilidad son las preocupaciones más grandes, en una ciudad que cuenta con más de tres millones de habitantes
La papeleta para la Alcaldía de Quito consta de doce rostros y, desde mediados de mayo próximo, una de esas figuras tendrá que lidiar con los problemas que agobian a la ciudad. Ahí se pondrá a prueba su plan de trabajo y esas promesas para cubrir los vacíos de gestiones anteriores, afectaciones por la pandemia, el clima y otros factores que han complicado la vida de sus más de tres millones de habitantes.
- Violencia y seguridad. Este tema es uno de los que más preocupan a los capitalinos debido al aumento de delitos. Es que de 14.490 robos en 2021 a personas, bienes, carros, domicilios, unidades económicas y motos, en 2022 se llegó a 15.344. También subieron los hechos violentos: de 142 en 2021 pasaron a 182 en 2022, entre homicidios (la mayoría), asesinatos y femicidios (cuatro). Preocupa más porque los capitalinos aportan sobre los ocho millones de dólares anuales para una tasa de seguridad de la que no tienen resultados. La oferta es implementar tecnologías, mejorar el espacio público y apoyar las tareas de los policías, aunque esa última es una competencia del Gobierno central.
- La movilidad es otro tema que agobia a los capitalinos. El incremento del parque automotor ha provocado intenso tráfico en distintos puntos y a todas horas. Es que la ciudad tiene 480 mil vehículos registrados y 200.000 flotantes circulando (los que vienen de otros cantones a trabajar o pasan a otras ciudades). Hay 3.065 buses en la capital. En la ciudad el año pasado se registraron 3.201 siniestros de tránsito, que dejaron 1.970 lesionados y 234 fallecidos.
- Servicios básicos. De acuerdo con indicadores del INEC, en Quito el 99,9 % de los hogares reportan una recolección adecuada de desechos sólidos, mientras el 99,9 % dispone de un sistema adecuado de eliminación de excretas. El porcentaje de hogares que viven en hacinamiento es del 3,9 %, según las cifras. Los números difieren de sectores alejados de la capital en donde existen hogares que no tienen un adecuado sistema de evacuación de desechos, ni acceden a la red pública de agua potable o a una recolección adecuada de basura.
- Empleo. En el cuarto semestre de 2022, Quito registraba la tasa más alta de desempleo, en comparación con ciudades como Guayaquil, Machala, Cuenca o Ambato. Según los indicadores laborales respecto a la Población Económicamente Activa en la capital, se registra una tasa de desempleo de 7,7, mientras que la tasa de empleo adecuado está en 51,9 y la de subempleo en 21,5. Una de las explicaciones para la elevada tasa de desempleo es que la capital acoge a una elevada cantidad de población migrante interna y también de otros países. Aunque esa no es una competencia de la autoridad municipal, también preocupa a los capitalinos.
El exalcalde Augusto Barrera señala que los grandes desafíos para la nueva autoridad incluyen poner en orden el aparato municipal, aspectos tributarios y la coherencia institucional. Habla de políticas de inclusión y cohesión social, construir el sistema integrado de transporte, poner a funcionar el metro y ordenar a todos los actores.
También cree que el nuevo alcalde debe enfrentar de manera sistémica la seguridad, retomar la obra pública (especialmente en los sectores vulnerables), dinamizar la economía local, revitalizar la ciudad construida y recuperar el control de aspectos urbanísticos, usos de suelo y proyectos inmobiliarios.
Esos desafíos fueron provocados por los efectos de la crisis económica y la pandemia, y se reflejan en desempleo e incremento de la pobreza, además de la fragmentación política y social.
Agrega un deterioro de la capacidad municipal en los últimos nueve años, lo que se expresa en la enorme rotación de funcionarios, improvisación y baja ejecución presupuestaria, con falta de obras o proyectos significativos en estos años. Finaliza con el debilitamiento del principio de autoridad y erosión de la legitimidad del Municipio.
Los quiteños, agobiados por la inseguridad y la delincuencia
Leer másCristóbal Buendía, director del Observatorio de Movilidad de la capital, dice que el escenario que se le planteará al nuevo alcalde en materia de movilidad es bastante difícil, tomando en consideración la puesta en funcionamiento del metro de Quito, la inversión más importante de la historia de la urbe. Cree que eso lleva consigo la necesidad imperiosa de la reorganización del sistema de transporte público en toda la ciudad en lo que respecta a rutas, frecuencias, modelo de gestión, tanto institucional municipal como de las operadoras de transporte.
Asimismo, la implementación de un sistema integrado de recaudación, y de mecanismos de control y monitoreo de las unidades de transporte público, aparte de la creación del fondo metropolitano de financiamiento y la movilidad, entre otros aspectos.
“Esos son los grandes retos que tendrá el nuevo alcalde, sin dejar de lado el tema del tráfico, es decir la implementación de un sistema inteligente de semáforos y la red de institucionalización de capacitación de los agentes civiles de tránsito, para que sean gestores del tránsito y no simplemente personal sancionador”, concluye.