Los parientes y amigos, consternados por lo ocurrido, esperaban que trasladen sus restos.

Dudas, dolor e indignacion

Los deudos esperaban el resultado del examen forense para conocer la verdadera causa de deceso de la joven, que salió de su casa y no retornó.

En el exterior del domicilio de la familia Mendoza, en el sector Aguas Blancas de la parroquia dauleña El Laurel, aguardaban por los restos de la estilista Antonella Espinoza Mendoza, quien murió tras haberse aplicado una sustancia en su cuerpo.

Hasta la tarde de este viernes 18 no habían podido retirar el cadáver del Laboratorio de Ciencias Forenses de Guayaquil, porque faltaba arreglar algunos trámites legales.

Susana Mendoza Coello, de 45 años, tía de la joven, recordó que hace seis días fue la última vez que vio con vida a su sobrina. Ella la había visitado en su domicilio.

Después supo que el miércoles último, cerca del mediodía, Antonella, integrante de la comunidad LGBTI, salió de su domicilio manifestándoles a sus familiares que iba al funeral de un amigo en Santa Lucía. Posterior a eso, viajaría a Guayaquil a comprarse ropa.

Desde ahí no supieron de ella. Susana Mendoza sostuvo que alrededor de las 02:00 del jueves pasado su hermana Flora recibió una llamada a su teléfono celular.

La amiga trans con quien Antonella había viajado al Puerto Principal “le dio la infausta noticia del fallecimiento de mi sobrina”.

En ese momento se enteraron de que su familiar se habría ido a colocarse silicona en los pechos. “Al comunicarme mi hermana, yo estaba con la duda y no creía que mi Antonella había fallecido. Ella nunca nos había comentado nada de que se iba a suministrar eso”, explicó la señora.

“No sabemos por qué la amiga con la que viajó a Guayaquil ha mentido al ingresar grave a mi sobrina a la casa de salud, donde ha manifestado a los doctores que Antonella había sufrido un accidente de tránsito. Por esto se complicaron los trámites y se está demorando el retiro del cuerpo”, manifestó.

Inconformidad

La señora está molesta porque hay un video que está circulando en las redes sociales en el que se ve a su sobrina agonizando.

Además reiteró que son de escasos recursos económicos y por ello han solicitado colaboración para poder darle sepultura a su parienta.

Felipe Jiménez Arreaga, otro familiar de la víctima, también expresó su inconformidad con lo manifestado por la amiga de Antonella.

“Estamos a la espera de los resultados de la necropsia de ley, que determinará qué líquido le pusieron, porque hasta los pulmones los comprometió. Queremos saber en qué lugar de Guayaquil le pusieron este líquido”, dijo Jiménez.

En medio de la consternación por lo ocurrido, tanto familiares como pobladores del sector 1 de Aguas Blancas aguardaban por los restos de la estilista Antonella Espinoza Mendoza, para cumplir con el deber cristiano de sepultarla.

Lo que ocurrió “se lo dejamos en la mano de Dios, que Él haga justicia”, finalizó la tía de la víctima. (ERS-IC)