Los agricultores de Santa Elena corren peligro por la falta de agua
El equipo en una estación de bombeo de agua es reparado y el otro está dañado. Los productores temen quedarse sin agua.
El sector bananero ha puesto la voz de alerta en Santa Elena. “El grado de riesgo relacionado con el abastecimiento actual al sistema trasvase desde el bombeo en el río Daule es alto, toda vez que solo se encuentra operativo el grupo de bombeo número 2”, dice una carta de la Asociación de Exportadores, Asociación de Comercialización y Exportación, la Cámara de Agricultura y Agroban.
Una de las bombas trabaja, pero a la vez está en mantenimiento. El problema grueso es que no existiendo un grupo de bombeo en stand by, que es lo apropiado, pues el grupo de bombeo N° 1 se encuentra dañado por causa de una mala reparación y una nueva licitación está en proceso; los trabajos demorarían alrededor de seis meses, como mínimo.
“La falta de mantenimiento, inversiones y la mala gestión de recursos han devenido en daños estructurales y otros inconvenientes que al presente requieren atención inmediata, si no se pretende dejar a toda la provincia sin agua, tanto para consumo humano como para atender los cultivos”, señala.
En 25 años que tiene el proyecto, nunca se ha bombeado con las dos unidades simultáneamente. Para poder hacerlo y duplicar la capacidad actual (a 22 metros cúbicos por segundo), se deben realizar una serie de obras complementarias valoradas en $ 5 millones (mantenimiento; adquisición de repuestos de motores y bombas; cambio de sistema de arranque; y desazolve de canales).
Los bananeros recomiendan también realizar el dragado de los canales de alimentación de las estaciones de bombeo Daule y Chongón (140 metros de largo y 2 kilómetros de largo, respectivamente), en especial el canal de alimentación para la de Chongón, pues la gran cantidad de sedimentos y de vegetación acuática, existente actualmente, atentan contra la extracción del flujo requerido por las unidades de bombeo de Chongón, poniendo en riesgo el abastecimiento para agua potable y para los regantes (agricultura), ya que ahora está el agua la cota +43 en el embalse Chongón, mientras el nivel de sedimentos se encuentra en la cota +42.
El Acueducto de Santa Elena es un proyecto de infraestructura de uso múltiple, capaz de proporcionar agua para el desarrollo agrícola de unas 43.000 hectáreas con dotaciones de unos 7.500 metros cúbicos por hectárea al año, abastecer de agua potable a una población de unos 400.000 habitantes a una dotación de 200 litros por habitante por día, así como para dotar de agua usos industriales relacionados con la actividad petroquímica y otras manufacturas.
ACTUALIZAR USUARIOS. Se recomienda actualizar el padrón de usuarios mediante un catastro que permita identificar a aquellos agricultores que utilizan el agua sin tener contrato con la EPA, lo que causa un descontrol en la contabilización del agua consumida en el Trasvase y el consiguiente no cobro de los servicios que reciben.
LA HISTORIA. Hace 25 años el Trasvase fue inaugurado y fue manejado por Cedegé, que en 2010 fue liquidada y todos sus activos pasaron a formar parte de la Secretaría Nacional del Agua, Senagua, con sede en Quito. Y este 2020, Senagua fue absorbida por el Ministerio del Ambiente y Agua (MAAE).
Desde el pasado 19 de diciembre hasta el 3 de enero del 2021 la Gobernación de Santa Elena resolvió militarizar el canal del trasvase que lleva el agua cruda desde Chongón hasta la presa El Azúcar, el objetivo fue que el líquido sea prioridad para el consumo humano, es que el líquido es retenido por alrededor de una veintena de haciendas que se han instalado al borde de este conducto.
Las autoridades peninsulares mediante un estudio establecieron que en la actualidad la demanda del agua supera la oferta, debido al incremento de las empresas agrícolas asentadas en un tramo de 45 kilómetros, la mayoría son bananeras, y son las que más necesitan de agua.
“Para producir banano se necesita del 80 % de suelo húmedo, similar a lo de la palma africana que es otra planta que se cultiva en gran cantidad en estos lugares”, comentó el ingeniero agrónomo Felipe Borbor, quien explicó que ahora se hace necesario que se bombee más agua por el canal desde Chongón.
“Se nos entrega 11 metros cúbicos por segundo, cuando en realidad se necesita alrededor de 13 para la potabilización del agua, la mayoría del líquido se queda en las haciendas, es un problema muy grave”, refirió Vicente Paredes, vocero de Aguapen, empresa encargada de la distribución de agua potable.
El gran problema es que la población peninsular creció, como la agricultura.
Aunque en el sector de Santa Elena, desde la construcción del trasvase, se comenzó produciendo hortalizas (tomate, cebolla perla, melón, sandía), en este se desarrollan grandes proyectos de producción de uva o pitahaya.
Hoy, la mayoría de extensión es de banano orgánico, cacao, fréjol, aguacate, plátano, guanábana, habas, maíz y otros cultivos.