El alquiler de 260 megavatios con termoeléctricas a diésel puede ser más caro
El Gobierno alquilará generación termoeléctrica terrestre por 18 meses para la Subestación Pascuales, en Guayaquil
El fin de semana se cerró el plazo de recepción de ofertas para la adjudicación de un contrato de alquiler de 260 megavatios térmicos, cuyo proceso lo abrió el pasado 17 de octubre el Ministerio de Energía y Minas, en conjunto con la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec).
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Se trata de un proceso que contempla el alquiler de generación termoeléctrica terrestre por un plazo de 18 meses y que se ubicará junto a la Subestación Pascuales, en Guayaquil (Guayas). Los equipos a adquirir funcionarán con diésel y su energía se incorporará al Sistema Nacional Interconectado (SNI) a través de la línea de transmisión Chorrillos – Pascuales, a nivel de 230 Kilovoltios (kV). Una nueva medida para mitigar los apagones eléctricos que mantienen en penumbra al país que lidia con hasta 8 horas diaras de corte.
Este proceso representa un cambio de estrategia por parte del Gobierno, según indica a EXPRESO el analista económico Alberto Acosta Burneo, que reemplazará el alquiler de generación a base de fuel oil mediante barcazas, por generación térmica terrestre, pero que le costará al Estado al menos $514 millones adicionales
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Leer más“En su lugar ha decidido alquilar generación terrestre utilizando diésel, pero este cambio saldrá muy caro, primero porque el diésel cuesta 61 % más que fuel oil”, indica el experto a EXPRESO.
Pues compara. Hoy el precio por galón del diésel, sin subsidio, es de $2, 91, mientras que el fuel oil cuesta $1,81. Una diferencia, señala, que aumentará los costos operativos significativamente.
Otro factor del millonario costo adicional, se dará, indica, porque al no producirlo localmente, el diésel a usarse tendrá que ser importado, en contraste con el fuel oil que es un residuo de la refinación local que lo generan las refinerías del país, por lo que está disponible de manera inmediata.
Estos factores marcan una diferencia millonaria entre las dos opciones para 18 meses que es el plazo de la contratación. Pues el costo estimado del combustible para la generación con fuel oil, en ese lapso, es de $344 millones; mientras que, para la opción a diésel, el gasto se dispara a $858 millones. Es decir, en 18 meses, el costo operativo se incrementará en $514 millones adicionales, mencionó.
“Es un monto muy significativo. Eso significa que el fisco va a estar ahorcado y tendrá menos recursos para hacer otro tipo de gastos. Se va atrasar en pagos, va a tener menos capacidad para cumplir con el presupuesto y se generará una falta de liquidez en la economía. El Gobierno tiene que contratar generación emergente de electricidad pero que sea lo más eficiente en cuanto a costo beneficio, ¡no puede ser las más costosas!”, añade a este medio.
Según el analista, este cambio de estrategia también retrasará la llegada de nueva energía, ya que con diésel, esta energía estará recién disponible en 60 días, mientras con fuel oil el tiempo sería de la mitad (30 días) porque es un proceso que ya está en curso.
“No hay margen para errores, no podemos permitirnos que una crisis energética se convierta en una crisis económica, por errores de gestión”, concluye.