Apagones en Ecuador continúan: ya no son residenciales, pero sí industriales
El Gobierno le 'carga' el peso de la crisis eléctrica a las industrias para sostener su promesa de eliminar los cortes de luz
Los apagones en Ecuador, que hasta el jueves 19 de diciembre habían afectado a los más de cinco millones de hogares, continúan. Si bien este viernes 20 de diciembre han cesado los cortes de luz para los sectores residenciales, la medida permanece para un sector: las industrias. Aquello es un reflejo de que la crisis eléctrica no ha desaparecido.
El gobierno de Daniel Noboa ha decidido aplicar racionamientos que llegan a ser de ocho horas diarias para la mayoría de industrias, salvo 7: dos acerías, dos mineras y tres cementeras, las cuales han sido señaladas como las de mayor consumo eléctrico en el país y las han ubicado en la categoría AV 1 y AV2.
‘Apagón industrial’ ya afecta a la producción de cemento y acero
Leer másEstas grandes industrias, que necesitan subestaciones para su conexión al sistema eléctrico, se han desconectado desde el 15 hasta el 31 de diciembre. Las demás, mantendrán los cortes regulares que han estado vigentes hasta ahora, según ha indicado el Gobierno.
¿Cómo es el proceso del apagón industrial?
La ministra encargada de Energía y Minas, Inés Manzano, ha explicado el apagón industrial se implementó con el fin de garantizar el suministro de energía a todos los ciudadanos. Las industrias afectadas por los cortes de luz están conectadas a la línea de transmisión, y al desconectarlas durante varios días, se libera espacio para que se pueda cubrir el consumo doméstico.
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Transelectric —encargada de la transmisión de energía a nivel nacional, utilizando una red eléctrica en forma de anillo conocida como el Sistema Nacional de Transmisión— y las distribuidoras tienen alimentadores exclusivos para estos grandes consumidores, por lo que los cortes se pueden implementar de manera focalizada.
Bastaría con cortar el suministro a estas líneas de transmisión —son 6.200 km que conectan al país, según CELEC— para interrumpir el servicio a las grandes industrias, lo que, aunque afecta a pocos, genera un ahorro energético significativo.
La Contraloría General del Estado informó que efectúa un examen especial a dos procesos de contratación que realizó la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec), tras la declaratoria de emergencia ante la crisis eléctrica que derivó en los apagones.
— Diario Expreso (@Expresoec) December 15, 2024
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¿Cómo se afectan las grandes industrias?
Las grandes industrias representan una porción significativa del consumo energético del país. Por ejemplo, solo el Parque Industrial de Cuenca, que alberga 70 empresas, se verá afectado por cortes de hasta ocho horas diarias. Estas empresas dependen de la energía continua para mantener sus operaciones, y el golpe a su producción podría tener repercusiones económicas graves, afectando tanto sus ingresos como los 100 mil empleos directos que generan.
Apagones industriales trastocan jornadas y amenazan al empleo
Leer másMaría Paz Jervis, presidenta del Comité Empresarial Ecuatoriano aseguró días atrás que estos apagones focalizados para las industrias dejarían pérdidas de 100 millones de dólares en las exportaciones. La titular del gremio empresarial señaló que son más de 15 días junto al feriado de Año Nuevo, precisamente 21 días, para las empresas que están en la línea AV2 y algunas de la AV1.
¿Un futuro más brillante?
La esperanza es que con la eliminación de los apagones en los hogares y la restricción a las grandes industrias, el país logre estabilizarse hasta finales de año. Sin embargo, la verdadera pregunta es: ¿cómo se garantizará que esta solución sea duradera?
De acuerdo con el análisis de expertos anteriormente consultados por EXPRESO, el Gobierno necesita asegurar un sistema eléctrico más eficiente y, sobre todo, poner en operación los contratos de nueva generación térmica para evitar que los apagones regresen en enero.
Por ahora, Ecuador se encuentra en un respiro temporal, pero la incertidumbre sigue siendo el verdadero desafío. Las lluvias han permitido que los embalses hidroeléctricos se recarguen; hay estabilidad pero no seguridad energética, al no cubrirse el déficit que mantiene el Sistema Nacional Interconectado. Sin solucionarse la crisis eléctrica, la posibilidad de nuevos apagones continúa latente.
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