Bananeros reaccionan ante el índice de delitos que debilitan la competitividad

El robo de insumos agrícolas no es un problema nuevo para el sector bananero, pero este tiende a generar asombro por las mayores pérdidas económicas que se dan en un contexto de alto índice delictivo que afecta sobre todo en zonas rurales. 

Por trimestre, esta industria ha llegado a contabilizar hasta $ 280.000 en pérdidas por el robo de bombas, agroquímicos, maquinarias y objetos personales de productores que, sin control alguno, están siendo vendidos en plataformas comerciales o en redes sociales. La problemática, una de las tres que aquejan al sector después de las extorsiones y contaminación de contenedores, fue expuesta este 15 de noviembre de 2023, por los gremios de producción y exportación de la fruta, que con la ayuda de una campaña de concientización buscan contrarrestar este delito. 

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José Antonio Hidalgo, presidente de la la Asociación de Exportadores de Banano (AEBE), sostuvo que si la tendencia de este tipo de robo avanza al mismo ritmo, el perjuicio podría llegar a los $ 1,1 millones anuales. Este programa, denominado   "Demos una mano, comprando por la derecha el futuro del banano se aprovecha", dijo, tendrá la colaboración de la Policía Nacional y de técnicos del Servicio de Rentas Internas (SRI), para detectar y sancionar la venta de insumos que no cuenten con el debido respaldo tributario. 

Leonidas Estrada, representante de Agroban (Corporacion de Bananeros Ecuatorianos), dijo que esta situación es preocupante porque los delitos que se cometen vienen de pequeñas mafias que están en el sector y que alimentan el cometimiento de otro tipo de delitos como las extorsiones. "Esto es algo que rebota en el pequeño y en el gran productor y avanza y toca al personal de campo con amenazas de vacunas y por ello ya la gente no quiere trabajar", dijo. 

Hidalgo sostuvo que respecto al tema de extorsión, la industria ya ha hecho un pedido para reactivar destacamentos militares en las zonas de Los Ríos, El Oro y Guayas, para tener mayor control sobre todo en corredores logísticos. La solicitud no es nueva, pero esto es algo que no ha podido cumplirse por la falta de recursos de la Policía y el Ejército, que espera, lleguen con el inicio de un nuevo Gobierno. 

• A la espera de los escáneres en los puertos 

Al tema de robos de insumos y extorsiones, se une otra preocupación y no menor: la contaminación de contenedores en puertos. Al ser el banano uno de los productos de mayor exportación, es mayor el riesgo de que la carga salga contaminada con sustancias estupefacientes .

Richard Salazar, director Ejecutivo de la Asociación de Comercialización y Exportación de Banano (Acorbanec), sostuvo que ahí el gran pendiente es la instalación y operación de escáneres. Si bien los escáneres no son la panacea, aplacarían este problema. 

A la semana, el país exporta unos 6.500 contenedores, de los cuales el 40 % se someten a una inspección física, que está generando demoras y una afectación en la cadena de frío que conlleva a que parte de la fruta llegue en mal estado a su destino. Los escáneres evitarían estos inconvenientes y si bien Senae (Servicio Nacional de Aduanas) había prometido que estos operarían oficialmente desde la primera quincena de noviembre, estos no están listos. 

Los dirigentes dicen estar trabajando para articular medidas para estos problemas que no solo amenazan con la seguridad y tranquilidad de quienes trabajan en esta industria, sino contra la rentabilidad y la imagen internacional del país, que menoscaban la competitividad de la fruta. Al año, solo este sector debe destinar $ 100 millones en temas de seguridad. 

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