Cauteloso optimismo frente a la renegociación de la deuda externa de Ecuador
Ecuador puede conseguir el apoyo necesario en la mayoría de los bonos, pero la duda se mantiene en el 2024. El acuerdo con el FMI es otra interrogante
El día llegó. Hoy, 3 de agosto de 2020, concluye el plazo para que los tenedores de bonos acepten la propuesta del Gobierno ecuatoriano para renegociar la deuda.
En principio, la fecha de cierre era el 31 de julio, pero se aplazó hasta hoy tras la solicitud de la Corte del Distrito Sur de Nueva York, por la demanda interpuesta por los fondos Contrarian Capital y GMO que solicitaban bloquear el proceso de reestructuración de la deuda.
La jueza Valerie Caproni rechazó el pedido de los dos fondos de inversión y con ello el Gobierno ecuatoriano sorteó un obstáculo y llega con un escenario favorable.
El Gobierno requiere que el 66 % de los acreedores se adhieran a su propuesta y el 75 % en el caso de los bonos 2024.
Analistas de firmas financieras consultados por EXPRESO creen que Ecuador tiene las posibilidades a su favor para reestructurar la deuda. Sin embargo, quedan algunas incógnitas.
Existe una gran posibilidad que el Gobierno ecuatoriano pueda obtener el apoyo requerido de los tenedores de la serie cuyo umbral es del 66 %, pero está mucho menos claro si podrá obtener el apoyo del 75 % de los propietarios de los bonos 2024, aseguró Tiago Severo, analista para América Latina de Goldman Sachs.
En caso de que eso ocurra, dijo Severo, el Gobierno probablemente continuaría y reestructuraría las otras series, mientras que posiblemente reabriría las negociaciones con los tenedores de los papeles 2024. En última instancia, el analista cree que las perspectivas de un acuerdo integral con los bonistas son grandes, aunque quizá las partes puedan demorarse un poco en conseguir un consenso.
Siobhan Morden, directora de estrategia de renta fija para América Latina de Amherst Pierpont, coincide en que el Gobierno puede conseguir consensos para renegociar algunas series de bonos. No obstante, la gran incógnita es qué pasará con el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), uno de los requisitos para sellar el acuerdo con los acreedores. “El problema en Ecuador es que es difícil lograr un acuerdo excepcional, con mayor financiamiento, porque hay un ciclo electoral”.
Mientras que Norman McKay, analista de Economist Intelligence Unit (EIU, por sus siglas en inglés), es “cautelosamente” optimista en que Ecuador logre renegociar su deuda.
EL ESCENARIO SEGÚN EL GOBIERNO. Finanzas ha mencionado que cuenta con el apoyo de más del 60 % de los bonistas y hay una alta probabilidad de lograr un acuerdo.
En términos generales, la propuesta del Gobierno ecuatoriano, anunciada el 6 de julio, plantea un recorte de capital equivalente al 9 % para todos los bonos. Ese recorte del 9 % equivale a unos $ 1.500 millones. Además, se establece bajar el interés, promedio, del 9,3 % a 5,2 %, ampliar el plazo por 10 años más y cinco años de gracia para pago de capital y dos para intereses.