Cinco provincias mueven a las cooperativas en el país
Las entidades que integran este mercado financiero muestran una recuperación tras la crisis de la pandemia. Algunas han ampliado operaciones estos meses.
La Sierra ecuatoriana concentra el 73 % de la cartera de crédito del sector financiero popular y solidario. A su vez, esta región capta el 83 % de los depósitos de los asociados, según datos de la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria (SEPS), hasta abril.
La billetera móvil no despegó ni en manos del sector privado
Leer másPichincha, con un monto en colocaciones crediticias de 3.941 millones de dólares a abril y depósitos por 5.712 millones, es la provincia de mayor importancia para este mercado. Le siguen Azuay, Tungurahua, Guayas y Cotopaxi. Solo una provincia de la Costa, por su relevancia económica, destaca entre las primeras cinco.
La razón más importante está en la historia del cooperativismo, que tiene su origen en procesos cooperativos comunitarios, de la mano de la Iglesia católica, en la Sierra centro del país, recordó Margarita Hernández, superintendenta de Economía Popular y Solidaria.
Si bien la mayoría de las entidades nacieron en esta región, hoy son muchas las que se han expandido a escala nacional, principalmente las que pertenecen a los segmentos 1 y 2 (las de mayores montos en activos). Actualmente, hay 473 cooperativas y mutualistas de ahorro y crédito activas en el país, con 5,2 millones de socios, para marzo pasado, según la SEPS.
“Se han vuelto más nacionales, pero siguen cercanas a su lugar de origen”, añadió Édgar Peñaherrera, gerente general de la Red de Integración Ecuatoriana de Cooperativas de Ahorro y Crédito (Icored), que integra 40 entidades.
También hay factores culturales: los ciudadanos en la región Interandina tienen mayor hábito de ahorro que en la Costa, donde por ende es menor la capacidad de endeudamiento, coincidieron la superintendenta y el gerente de Icored.
Superintendencia recuerda que está prohibida la creación de cooperativas
Leer másLa Costa concentra el 13 % de los depósitos y el 21 % de las colocaciones de crédito.
La falta de educación financiera en el Litoral también se refleja en la informalidad, al ser un mercado usualmente más vulnerable a las captaciones ilegales de dinero, con porcentajes muy altos de interés, añadió Peñaherrera.
“Muchas entidades están buscando expandir sus servicios, pero esto no depende solo de la visión de la institución, sino de la dinámica del territorio y la identificación con la cooperativa. Sin embargo, estas barreras se han ido superando”, recalcó Juan Pablo Guerra, gerente general de la Unión de Cooperativas de Ahorro y Crédito del Sur (Ucacsur), quien considera que hay un nicho por explotar en la Costa.
En cuanto al Oriente, la principal razón de la limitada presencia del sector es la dispersión poblacional, argumentó Hernández. Esto va de la mano con la baja inclusión financiera de esta región, que concentra el 3,5 % del monto total de la cartera de crédito y el 6 % de los depósitos.
La Cooperativa Crea, fundada en Cuenca en 1964, comenzó hace tres años un plan de expansión. Anteriormente operaba solo en Azuay, Cañar y Morona Santiago. Ahora tiene oficinas en Loja y, desde hace dos meses, en Pastaza y Guayas. “Hicimos un estudio de mercado y vimos que la demanda potencial en Guayaquil era fuerte”, comentó Patricio Barzallo, gerente general de la entidad, sobre la reciente apertura de dos sucursales en la ciudad.
Para este crecimiento, Crea ha aprovechado los cierres de oficinas del Banco del Pacífico en varias ciudades del país, en donde quedó un nicho de clientes sin atención. Por ejemplo, en ciudades como Pastaza y Guayaquil compró locales que ocupaba la entidad financiera.
Los bancos se recuperan de la crisis de manera desigual
Leer másLa próxima meta es continuar expandiéndose en la Sierra, con tres sucursales en Pichincha y otras dos en Tungurahua y Chimborazo. Esta cooperativa, perteneciente al segmento 1, agrupa a 71.000 socios.
- Crecimiento sostenido
La cartera de crédito del sector financiero popular y solidario cerró en abril con un saldo de 15.686 millones de dólares, lo que representó un alza del 22,6 % con relación a igual mes del año anterior. Del total de la cartera, el crédito de consumo concentra el 49,6 %, seguido del microcrédito, con 38,7 %. Sin embargo, este último fue el que tuvo el mayor crecimiento interanual en abril (27 %). “El sector ha entendido su rol fundamental para superar la crisis de la pandemia”, señaló la superintendenta acerca de estos resultados.
El monto promedio de crédito otorgado en abril era de 8.467 dólares. La tasa de morosidad se ubicó en 4,5 %, lo que muestra una disminución con relación a los niveles de abril del 2021 (5,2 %) y del 2020 (5,9 %).