Créditos CFN: irregularidades que se escudan bajo reserva
La entidad se acoge al sigilo, pero expertos lo cuestionan porque en juego hay dinero público. La polémica se aviva mientras su gerente renuncia al cargo
Ha sido como lanzar la piedra y esconder la mano. Al menos, esa es la percepción que la gente ha llegado a tener sobre la actual administración de CFN, pues han pasado seis meses desde que denunció públicamente irregularidades en la dación de millonarios créditos impagos, pero hasta hoy no se conocen los nombres y rostros de las personas que se habrían beneficiado. Hasta diciembre de 2021, la cartera acumuló más de $ 700 millones, entre préstamos vencidos e incobrables.
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Leer másEl rechazo ha saltado a las redes sociales. “Por favor, ¡Necesitamos que la información de los deudores sea pública! ¿Cómo así que se declaran cientos de millones como incobrables y no pasa nada?”, decía hace unos días Marcos Salazar, un usuario de Twitter, como reacción a la noticia. “A los honrados que hemos sacado créditos en la CFN nos toma de 6 meses a 1 año hacer el trámite..,pero a un grupito les han dado cientos de millones de $$$ sin garantías y a dedo y resulta que nadie está preso”, opinaba, en cambio, Enrique Benetazzo.
No es que no exista voluntad para denunciar, legalmente hay limitaciones.
El actuar de la nueva administración de la Corporación Financiera Nacional (CFN), que ha sido calificada como acertada por desnudar la salud financiera de la entidad, empieza a sumar puntos en contra por no ir más allá y negarse a revelar el listado de deudores, una postura que hoy su presidente, Iván Andrade, conoce y dice respetar. Pero él aclara que si no lo han hecho, no es por falta de voluntad, sino por cumplir con el sigilo bancario que dicta el artículo 353 del Código Monetario y Financiero sobre los depósitos y captaciones de instituciones del sistema financiero y, con la reserva “en las demás operaciones activas, pasivas y contingentes”. La ley es clara, dice, estas solo podrán entregarse “a quien demuestre interés legítimo”, y siempre y cuando “no se perjudique al cliente”.
No obstante, expertos en el ámbito bancario cuestionan la forma en cómo estas líneas se interpretan. Para Xavier Villavicencio, exintendente de la Superintendencia de Bancos en el año 2013, el Código sí hace una excepción y es la de levantar la reserva para quien muestre un interés legítimo sobre el tema; en ese sentido, destaca el interés público que esta denuncia ha generado, “porque estamos hablando de cómo esto afecta a un banco público que se financia con dinero de todos los ecuatorianos. Si fuese un banco privado es otra cosa, porque el que va a perder la plata es gente particular, pero acá la pérdida la tendremos que asumir todo un país”, sostiene.
Un criterio parecido tiene Jorge Andrade, asesor en temas financieros, para él “habría que determinar cuál es el nivel de reserva que debe mantener la CFN sobre esa cartera”, que ya ha sido catalogada como vencida o incobrable.
Andrade aclara que la ley es general y que, como tal, explica, no se puede definir qué tipos de cartera y en qué estado se puede divulgar. “No dice de estos sí o de esto no se puede hablar, aquí el velo es tan fino que si publico algo, otros saldrían a decir por qué no ha publicado todo”.
es el monto aproximado de las deudas vencidas e incobrables que suma la CFN.
A los pendientes de la CFN hoy se suma la tarea de señalar a los responsables de la actual situación de la entidad, que hasta diciembre pasado reflejó $ 240 millones en pérdidas. Según se ha dicho, administraciones pasadas no solo fallaron por el débil control en la emisión de dinero (desde el 2014 al 2019), sino que poco o nada se hizo para desconcentrar el destino de ese crédito (fue a pocas manos) y transparentar el estado de la cartera.
Para Villavicencio y Jorge Andrade las denuncias son contundentes como para oficializar cualquier tipo de acción legal. Decir que el 30% del total de la cartera (de $ 1.500 millones) es improductiva es preocupante, dice. “Los abogados son muy hábiles en hacer interpretaciones, pero al menos deberían darnos alguna señal de que este tema se está trasladando a Fiscalía” o a entes de control.
Andrade señala que desde julio del 2021, fecha en la que él llegó a la entidad, existe una prioridad en su gestión y esa es recuperar la cartera. Para él no todo es pérdida. La entidad, recuerda, no solo ha corregido el nivel de provisiones que año a año se debió hacer para cubrir posibles deudas impagas, sino que ya está encaminando 1.185 procesos coactivos para recuperar $ 390 millones.
Cuando se le pregunta sobre la tarea de señalar a responsables, él sostiene que eso podrá darse en otra fase del proceso. “Pero hay que hacer una auditoría forense para determinar quiénes estaban, si cumplieron o no las normativas, si hubo o no control. Eso es otro tipo de trabajo. ¿Es algo que se debería hacer? Sí, desde luego. ¿Es algo que nos costará dinero? Sí, desde luego”.
- SALGADO, DESPUÉS DE LA DENUNCIA PÚBLICA, SU SALIDA
Eduardo Salgado presentó el pasado 9 de febrero de 2022 su renuncia a la gerencia General de la Corporación Financiera Nacional (CFN). En funciones lo reemplaza Virna Rossi Flores, como gerente encargada.
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Leer másSalgado asumió el cargo en julio de 2020, pero el pasado miércoles, 7 meses después, presentó su renuncia al puesto. EXPRESO quiso conocer los motivos de su salida, pero desde la entidad se prefirió no emitir comentarios sobre el tema. La renuncia de Salgado se dio cuatro días después de que este Diario diera detalles de la real situación financiera de la entidad, que hasta el año pasado acumuló $ 240 millones en pérdidas y más de $ 700 millones en cartera vencida e incobrable. Salgado, junto a Andrade, presidente de CFN, denunció las irregularidades que administraciones pasadas habrían cometido en la entrega de créditos. Los casos más graves, préstamos sin sustento y con requisitos laxos, se emitieron en los años 2014, 2016, 2017 y 2019.
Para Salgado, las anteriores administraciones quedaron en deuda con le banco. No solo se falló por el débil control en la emisión de dinero, sino por la falta de una política que pueda desconcentrar el destino de ese crédito (fue a pocas manos) y porque, lo más importante, poco o nada se hizo para transparentar el estado de la cartera. La actual administración cuestiona la forma en cómo en años anteriores se gestionaron las provisiones, los montos que la entidad asigna para cubrir deudas impagas. Durante años, las asignaciones no eran lo requerido, lo que hacía que la entidad mostrara números finales a su favor. El fin, según se denunció, era mostrar un buen balance. Rossi, quien ahora reemplaza a Salgado se desempeñaba como gerente de Unidad de Negocios en la CFN.