Dolarización en Ecuador: ¿qué implica la propuesta correísta de una ‘moneda digital’?
No es un plan nuevo. Estos han sido los intentos del movimiento político por implementarlo y los riesgos, según analistas
El plan de trabajo de la alianza Revolución Ciudadana – RETO, para la Asamblea Nacional 2025-2029, incluye una ley para garantizar liquidez al desarrollo. Esta iniciativa busca revertir las restricciones que impiden el financiamiento interno entre el Banco Central y el Ejecutivo y recuperar la posibilidad de implementar medios de pago electrónicos estatales, en complemento a los ofrecidos por el sector financiero privado.
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Durante una entrevista en el canal Ecuavisa, emitido el pasado domingo 16 de marzo de 2025, la asambleísta de la Revolución Ciudadana, Paola Cabezas, describió la propuesta como una “dolarización a la ecuatoriana” ante cuestionamientos sobre la supuesta intención de su sector político de debilitar la dolarización.
Cabezas afirmó: “Entendemos que la dolarización no significa hablar inglés, sino adaptarlo a la realidad ecuatoriana. Es necesario que la dolarización se configure de acuerdo a nuestras necesidades productivas. Es fácil hablar de dolarización cuando se cambian las reglas del juego para extraer recursos del país. Si queremos fortalecerla, debemos buscar mecanismos que permitan generar nuevos dólares e incentivar la inversión extranjera.”
Antecedentes y experiencias pasadas
Durante el gobierno de Rafael Correa se impulsó un sistema de dinero electrónico administrado por el Banco Central en 2014. No obstante, la administración de Lenín Moreno decidió descontinuarlo en 2018, ya que se consideraba que amenazaba la consolidación de la dolarización y mostraba un crecimiento limitado debido a la escasa confianza de la ciudadanía.
Posteriormente, el sector privado asumió la iniciativa bajo el nombre de Billetera Móvil (Bimo), que tenía como objetivo ofrecer una alternativa de pago a clientes de bancos y cooperativas, pero su baja adopción llevó a su desaparición a mediados de 2024.
Propuestas y polémicas en la campaña correísta
Dentro del plan de trabajo se destaca también el uso de las reservas internacionales para garantizar liquidez. Diego Borja, candidato a la Vicepresidencia por la RC, argumenta que los dólares en reservas se rentabilizan a tasas ínfimas (0,4 %), en contraste con los altos costos de endeudamiento, y recalca que Ecuador cuenta con recursos, pero no se utilizan en las prioridades nacionales.
Sin embargo, el tema que más genera controversia es la propuesta de implementar una “moneda digital” de banca central, concepto popularizado por Andrés Arauz. En declaraciones realizadas en abril de 2023, Arauz propuso la creación de medios de pago electrónicos que permitieran “aprovechar la dolarización” mediante instrumentos domésticos y soberanos, lo que él denomina la emisión de “ecuadólares”. Según esta idea, se trataría de una especie de convertibilidad electrónica en la que los dólares serían “absorbidos” para ser utilizados en pagos internacionales.
Riesgos de los ‘ecuadólares’
Analistas económicos han advertido que, si bien el dinero electrónico es viable cuando se respalda uno a uno con dólares físicos, el riesgo radica en emitir más dólares digitales de los que se pueden respaldar. Esta práctica, que economistas compara con operaciones de liquidez anteriores —donde el Banco Central prestaba dinero al Gobierno a cambio de títulos de deuda, “creando dólares de la nada”—, podría desembocar en la emisión de dinero inorgánico. Una sobreemisión descontrolada de “ecuadólares” podría, en última instancia, provocar una escasez de dólares reales y amenazar la consolidación del sistema de dolarización.
El Decreto 565 y la defensa de la dolarización
En un intento por contrarrestar estas propuestas, el Decreto 565, emitido el 18 de marzo de 2025 por el presidente Daniel Noboa, ratifica al dólar estadounidense como el único medio de pago oficial en Ecuador. El decreto prohíbe la emisión de cualquier moneda paralela, subrayando que el Banco Central, como entidad de derecho público, se limitará a mantener un sistema monetario estable. Además, se insta a la bancada de la Alianza Democrática Nacional (ADN) a impulsar reformas legislativas para modificar el artículo 303 de la Constitución, evitando así la instauración de mecanismos de pago alternativos que puedan comercializarse con descuentos significativos y generar distorsiones en el sistema financiero.
Entre la innovación y la estabilidad
La polémica gira en torno a la búsqueda de dinamizar la economía mediante métodos heterodoxos, como la inyección de liquidez a través de medios electrónicos, frente a la necesidad de preservar la estabilidad de la dolarización. Mientras el correísmo propone innovar con una “moneda digital”, las autoridades y algunos expertos insisten en que cualquier alternativa debe evitar riesgos que puedan desembocar en la pérdida de confianza en el sistema monetario ecuatoriano.
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