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Juan José Miranda, economista del Banco Mundial.
Juan José Miranda, economista en temas ambientales del Banco Mundial.René Fraga.

“Ecuador depende 60% de hidroeléctricas: urge diversificar”

Juan José Miranda, economista ambiental del Banco Mundial, conversó con EXPRESO sobre los problemas climáticos de Ecuador

Ecuador está por vivir nuevamente una etapa de cortes de luz en esta semana. Expertos apuntan a la crisis climática, que ha significado una aguda sequía que ha golpeado al sector energético y también al agrícola. La semana pasada, el Banco Mundial presentó el ‘Informe sobre Clima y Desarrollo’    (CCDR, por sus siglas en inglés) que dan cifras preocupantes. De no tomarse las acciones, el país podría tener graves consecuencias económicas y agudizar su pobreza. EXPRESO conversó con Juan José Miranda, economista sénior del Banco Mundial y uno de los autores del estudio.   

(Le invitamos a leer también: "Ecuador debe invertir $ 3.700 millones al año fara afrontar la crisis climática")

- ¿Cuáles son los principales hallazgos de este estudio?

- Básicamente, en este estudio destacamos tres puntos principales. Primero, la adaptación es crucial, ya que la crisis climática ya está ocurriendo, no es algo futuro. Estamos viendo sequías, inundaciones y sus impactos en el sector agrícola y eléctrico. El informe busca identificar los costos económicos de no invertir en adaptación y hace un llamado urgente a tomar esas medidas. El segundo punto es la necesidad de una coordinación institucional sólida. Se requiere una colaboración integral entre el sector público, privado y la sociedad civil, para crear una agenda orgánica y común frente a estos desafíos climáticos. El tercer aspecto es la inversión en sectores clave como el transporte, la agricultura y la energía, que son los más afectados por el cambio climático y los desastres naturales.

- ¿Han cuantificado cuánto podría perder el país debido a los efectos del cambio climático?

- Sí, hemos hecho proyecciones para el año 2050 y encontramos que los sectores más afectados son la agricultura y el transporte. En el transporte, por ejemplo, el deterioro de las carreteras y los costos indirectos asociados generan pérdidas económicas significativas. En la agricultura, la producción se ve gravemente afectada, reduciendo la oferta de alimentos. Trabajamos con dos escenarios: uno más seco y otro más cálido y lluvioso. En ambos casos, encontramos una reducción en el crecimiento del PIB (per cápita), en torno al 4 % en el escenario más pesimista y al 2 % en uno menos pesimista.

- ¿Esas cifras son pérdidas anuales?

- Sí, esas serían las pérdidas anuales proyectadas para 2050, si no se toman medidas. Sin embargo, el informe también muestra que si se hacen las inversiones adecuadas en adaptación y mitigación, las pérdidas podrían reducirse a cero.

Las asociaciones público-privadas pueden jugar un rol importante en Ecuador financiar y ejecutar estos proyectos.

- ¿Cuáles son las principales acciones de mitigación que debería tomar el Gobierno?

- En términos de mitigación, los sectores clave son transporte, energía y forestal. El transporte ha aumentado significativamente sus emisiones en los últimos años, y el sector energía sigue dependiendo en gran medida de fuentes hidroeléctricas. Aunque la energía hidroeléctrica es importante, las sequías afectan su capacidad, por lo que es fundamental diversificar hacia energías renovables, como la solar y la eólica. También es clave avanzar en la electromovilidad y mejorar la infraestructura vial.

- ¿Qué debería hacer el Gobierno frente a los cortes de luz y la crisis energética actual?

- Relacionado específicamente con el sector energético, hay dos estrategias clave. La primera es incrementar la oferta energética, pero sin depender de fuentes de combustibles fósiles. Es necesario promover energías renovables, como la solar y la eólica, que tienen un potencial muy fuerte en Ecuador y que actualmente no se están explorando lo suficiente. En Chile, por ejemplo, la energía solar ya constituye entre el 15 % y 20 % de su matriz energética, un modelo que Ecuador podría seguir. Además, es esencial mejorar la eficiencia en el consumo de energía y eliminar incentivos que promuevan un uso excesivo de electricidad.

- ¿Qué acciones debería tomar el Gobierno para aumentar la oferta energética? Ecuador tiene un modelo bastante estatista, ¿cómo se puede involucrar al sector privado en energías limpias para enfrentar esta crisis?

- En el informe, identificamos varias estrategias de manera más macro. Una de ellas es promover proyectos sostenibles de energías renovables, aunque sabemos que estos pueden tomar tiempo. También es importante hacer que el sistema hidroeléctrico sea más resiliente, dado que el 60 % de la generación de energía de Ecuador depende de las fuentes hidroeléctricas del país. Trabajar en otras vertientes que nutran y fortalezcan las hidroeléctricas Las sequías afectan gravemente esta capacidad, por lo que es fundamental diversificar la matriz energética. Otras de las soluciones es la interconexión con otros países que ayuden a exportar energía al país.

Hemos hecho proyecciones para 2050 y los sectores más afectados son la agricultura y el transporte.

- En el sector agrícola, ¿cuáles son los efectos del cambio climático y qué soluciones se proponen desde su estudio para el caso ecuatoriano?

- Es un desafío, pero se pueden hacer ajustes en el gasto público. Por ejemplo, reorganizar los subsidios para que estén alineados con los objetivos climáticos y eliminar aquellos que generan incentivos perversos. Esto permitiría destinar más recursos a acciones que beneficien tanto al desarrollo económico como a la lucha contra el cambio climático.

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