Los ecuatorianos prefieren regalar ropa en Navidad

Ofertas y promociones en centros comerciales, catálogos online, mercadería para todos los gustos en tiendas minoristas y hasta ferias de garaje proliferan en la temporada navideña. Este año no ha sido la excepción y, pese a la cautela con la que los empresarios y comerciantes arrancaron los primeros días de diciembre, el movimiento a lo largo del mes ha colmado sus expectativas.

“Con la inauguración del centro comercial Wayra, más otros puntos de comercio y las ferias en nuestra ciudad, seguramente el nivel de ventas aumente en las proporciones habituales”, señalaba el presidente de la Cámara de Comercio de Cuenca, Adrián Alvarado.

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Ese 40 % de incremento de la actividad comercial durante la temporada navideña se ha sentido en los diferentes espacios de negocio en todo el país. Para Cristina Páez, CEO de Ipsos Ecuador, la razón para que la actividad se mantenga boyante como en años anteriores, pese a la crisis de seguridad y de empleo que se vive en el país, obedece a que “los ecuatorianos somos positivos. En las peores crisis, al día siguiente vamos a trabajar, todos los días nos tenemos que levantar, hay ecuatorianos que viven el día a día y salen a trabajar, comercializar o atender. Porque un día sin hacerlo es un día menos de ingresos.

Esta aseveración la respalda con los resultados de la última encuesta de Ipsos, bajo el título ‘Percepción de los ecuatorianos sobre las festividades navideñas y sus expectativas para el 2024’. Según la encuesta, realizada a “ecuatorianos conectados”, es decir, realizado a través de paneles online, el 64 % considera que en el 2024 la economía mundial estará fortalecida en comparación con el 2023.

En este escenario, “los ecuatorianos conectados reciben el nuevo año con sentimientos de esperanza, felicidad y expectativa. El sentimiento de esperanza es más fuerte en la Generación X y el de felicidad en los más jóvenes (Z y Millennials). Sin embargo, no se puede pasar por alto el 27 % que siente preocupación e incertidumbre por el nuevo año, especialmente la generación Baby Boomers (entre los 59 y 77 años de edad); ellos ven un cambio generacional en los actores del Gobierno. El molde de lo tradicional, de lo que se deseaba en años anteriores ya no es una realidad. Estas tensiones generacionales son normales y las estamos viviendo en estos momentos”.

Eso también se refleja en cómo el 70 % de los ecuatorianos elige las redes sociales como su primer medio para buscar información y hacer sus compras navideñas. “¡Los hombres y los millennials lideran esta tendencia! Un 37 % busca información para comprar regalos a través de recomendación de amigos, especialmente los millennials, 25 % toma como referencia la información que ve en publicidad que aparece en televisión, sobre todo los hombres y guayaquileños un 15 % busca información en folletos para realizar sus compras navideñas, principalmente los hombres”.

La encuesta señala, además, que, a pesar de ser ecuatorianos conectados, eligen el estilo tradicional para realizar sus compras navideñas, es decir en tiendas físicas. Esta tendencia es más fuerte en millennials y aquellos que viven en Guayaquil. Los más jóvenes (Gen Z) prefieren hacer compras en línea. Y, de las compras, cinco de cada diez ecuatorianos han pensado en ropa para regalar en Navidad, un 39 % en juguetes y un 24 % en zapatos. “Ecuador es un país muy particular en acceso a la información.

Incluso, en poblaciones remotas hay una fuerte conexión a TikTok. Los smartphones están en todos los sectores socioeconómicos. Por eso, los paneles online de Ipsos tienen una segmentación alineada con la del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC). El universo incluye a peluqueros, taxistas, personas que tienen farmacias, ferreterías, amas de casa, etc.”, explica Páez.

Aunque para el comercio, la temporada navideña ha sido positiva, no todos la ven con ese matiz. Según Camilo Ontaneda Pinto, presidente ejecutivo de la Asociación de Industrias Textiles del Ecuador (AITE), el segundo semestre del año no ha sido positivo, a pesar de que desde octubre se ha experimentado una leve mejoría. “Comparado con el año pasado, los números están más bajos”.

Hay tres razones, además de la inestabilidad política que genera mucha incertidumbre, que explican esta situación. La primera es la informalidad en el sector. La segunda razón se refiere a la inseguridad, que genera contracción del mercado, porque la gente tiene recelo de salir a comprar o de movilizarse.      Y una tercera razón es que este año se denota un deterioro en la capacidad de endeudamiento de las personas.

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