El embalse de Mazar está en el nivel más alto en casi tres meses
En diciembre de 2024, el nivel de agua ha subido 10 metros gracias a las lluvias
La situación de las hidroeléctricas ha cambiado. Las lluvias de las últimas semanas han ayudado a incrementar la generación de las hidroeléctricas del país, que en meses pasados descendieron a niveles críticos debido a la sequía que atravesó la región.
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Desde inicios de diciembre de 2024, hasta este domingo 29 del mismo mes, el nivel de agua en el embalse de Mazar, considerado como el más clave para la generación eléctrica de Ecuador, subió algo más de 10 metros. Pasó de 2.112 metros sobre el nivel del mar (msnm), la mínima es 2.098, a 2.123 msnm este domingo; la cota máxima es 2.153 msnm, según los datos de la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec).
El actual nivel de agua de Mazar sobrepasa el de octubre de 2024, cuando llegó a 2.118 msnm. Las lluvias se han convertido en un factor clave para que el país suspenda los racionamientos de energía eléctrica. Desde el pasado 20 de diciembre, el Gobierno de Daniel Noboa suspendió los apagones para los hogares, aunque se han reportado cortes no programados esporádicos a escala nacional, y para el 1 de enero de 2025 se suspenderá la medida para el sector industrial.
Ubicado en la región del Austro ecuatoriano, el embalse de Mazar es la pieza clave del sistema eléctrico del país. Este reservorio garantiza el suministro de agua al Complejo Hidroeléctrico Paute, compuesto por las centrales Mazar, Paute y Sopladora, que juntas generan una potencia de 1.756 megavatios, cubriendo así el 38% de la demanda energética nacional.
Cuando el nivel del reservorio de Mazar disminuye, se genera un impacto en cadena. Este embalse alimenta, río abajo, al reservorio de Amaluza, el cual a su vez suministra agua a las centrales hidroeléctricas Paute-Molino y Sopladora.
La situación ha cambiado
Las lluvias se han hecho presentes en el país, sobre todo en el austro ecuatoriano, zona en donde se ubican las hidroeléctricas más importantes del país.
Los ríos más importantes de Azuay, según los registros de la empresa pública Etapa, pasaron de sequía a estado crítico, es decir, con riesgo de desbordarse en las últimas cuatro semanas.
"Desde el 27 hasta el 30 de diciembre se prevé que continúen las lluvias de variable intensidad, tormentas y ráfagas de viento en gran parte del país. se prevé que los días mas intensos serán el 27 y 29 de diciembre de 2024. Tome precauciones", señaló el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), a través de su cuenta de X.
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