Fase de pruebas de bloques Intracampos I aporta 9.600 barriles de crudo al día
Actualmente, las actividades se están desarrollando en seis de los siete bloques adjudicados
La fase de prueba en 23 pozos de los bloques adjudicados en la Ronda Intracampos I ha comenzado a generar resultados prometedores, aportando un promedio de 9,600 barriles de crudo por día a la producción nacional de petróleo. Esta fase exploratoria se lleva a cabo en diferentes zonas de la provincia de Sucumbíos.
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Actualmente, las actividades se están desarrollando en seis de los siete bloques adjudicados, ubicados en el centro-norte de la cuenca Oriente. Estos trabajos tienen como objetivo alcanzar las metas establecidas por cada operadora y contribuir al incremento gradual y sostenido de la producción de crudo en el país.
La distribución de la producción por bloques operados por Gran Tierra Energy (Canadá) incluye el Bloque #50 Charapa, con 2,000 barriles diarios, y el Bloque #51 Chanangué, con 2,100 barriles diarios. Los bloques bajo el Consorcio Frontera - Geopark (Canadá - EE.UU.) son el Bloque #88 Perico, con 2,600 barriles diarios, y el Bloque #92 Espejo, con 800 barriles diarios. Por su parte, PCR (Argentina) opera el Bloque #90 Sahino, con 2,100 barriles diarios, mientras que en el Bloque #91 Arazá Este se realizó la perforación, pero aún no cuenta con pruebas de producción.
La operación de prueba ha permitido la extracción de petróleo con grados API que varían entre 15º y 27º. Las empresas involucradas han reafirmado su compromiso con el Estado ecuatoriano, incrementando actividades de sísmica, geoquímica, gravimetría y magnetometría para optimizar la explotación de estos recursos.
La adjudicación de los bloques Intracampos I se realizó en mayo de 2019 bajo la modalidad contractual de Participación. La contribución de estas empresas no solo se refleja en el aumento de las reservas petroleras, sino también en el aporte a la producción diaria, los ingresos fiscales, la dinamización de la economía, la creación de empleo, y el desarrollo de encadenamientos productivos en las comunidades amazónicas. Todo esto se está llevando a cabo bajo estándares rigurosos de sostenibilidad y responsabilidad social, asegurando un impacto positivo y duradero en la región y el país.
