Fitch mejora la calificación de la deuda ecuatoriana a B-
La firma señala que el incremento de la calificación se debe al canje de los bonos que finiquitó la renegociación de la deuda con los acreedores.
La agencia calificadora Fitch también mejoró la calificación de la deuda ecuatoriana. Este 3 de septiembre de 2020, la firma anunció el incremento de la nota crediticia de RD a B- con perspectiva estable.
S&P mejora la calificación de la deuda ecuatoriana tras el canje de bonos y acuerdo con el FMI
Leer másDos días después de que la calificadora Standard & Poor's (S&P) anunciara la mejoría de su nota sobre la deuda ecuatoriana, Fitch también efectúa una acción similar.
La firma señala que la mejora de la calificación de Ecuador a 'B-' refleja la finalización de un 'canje de deuda en dificultades' (DDE) que Fitch considera que ha subsanado el evento de incumplimiento iniciado por la 'solicitud de consentimiento' en abril.
A pesar de los profundos desafíos económicos y la incertidumbre política, la DDE ha ayudado a respaldar la capacidad de pago a corto plazo tanto al reducir en gran medida el servicio de la deuda a corto plazo como al allanar el camino para un nuevo Servicio de Fondo Extendido (EFF) de $ 6.500 millones de 27 meses con el Fondo Monetario Internacional (FMI), dice Fitch.
Fitch espera que cualquier gobierno tenga incentivos para cumplir con el acuerdo con el FMI luego de las próximas elecciones en 2021, pero los riesgos electorales plantean una incertidumbre significativa en torno a los compromisos bajo el programa con el multilateral y el apetito por reformas y ajuste fiscal. Las calificaciones asignadas a los nuevos bonos son 'B-'.
No obstante, según la firma, la calificación 'B-' también refleja los riesgos de liquidez y sostenibilidad de la deuda que persisten a pesar del alivio que ofrece el acuerdo con el Fondo.
El riesgo país cae 643 puntos tras la renegociación de la deuda y el nuevo acuerdo con el FMI
Leer másLa calificadora señala que el país puede seguir teniendo el desafío de satisfacer sus necesidades de financiamiento, en particular a medida que el apoyo del FMI, que se espera sea anticipado, se desvanezca.
Asimismo, los riesgos políticos que rodean las elecciones de 2021 y las consecuencias económicas de la crisis del coronavirus pueden complicar la recuperación económica y el ajuste fiscal necesarios para garantizar la sostenibilidad de la deuda y recuperar el acceso al mercado.
La calificación también se ve limitada por una débil posición de liquidez externa, que aumenta las vulnerabilidades en el contexto de la dependencia de las materias primas y la dolarización, y un débil historial de pagos que compensa el apoyo de un alto ingreso per cápita, concluye Fitch.
