El Gobierno consigue mejores cifras fiscales, pero no confianza
El déficit fiscal cerró 2022 en una cifra igual al 1,7 %del PIB, menor a lo previsto. No obstante, el riesgo país aún es elevado y finalizó el año en 1.250 puntos.
Un Gobierno que ha hecho sus tareas en materia fiscal. El 2022 terminó con cifras mejores a las previstas. El déficit fiscal se ubicó en un monto equivalente al 1,7 % del Producto Interno Bruto (PIB), es decir, unos $ 1.900 millones según el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
En principio se esperaba que el déficit fiscal llegue al 2 % del PIB, es decir, entre $ 2.200 y $ 2.400 millones. Sin embrago, pese a buenas cifras fiscales, todavía no logra generar confianza en el mercado internacional. Es decir, al país todavía le sale muy caro pedir prestado dinero por las altas tasas de interés.
¿Qué es el déficit fiscal? En términos generales, es el faltante de dinero que tiene el Gobierno central, debido a que sus ingresos no alcanzan a cubrir todos sus gastos.
El déficit fiscal es un problema crónico que obligaba al fisco a contratar deuda y debido al mal historial como pagador del país las tasas de intereses a las que ha accedido han sido elevadas, lo cual generaba otro problema: altas sumas por pagar año a año, que en algún momento llegó a sobrepasar lo que se destinaba a salud o educación.
La caída del déficit fiscal en 2022 obedece a mayores ingresos: por un lado, se recaudó más impuestos gracias a la reforma tributaria y el alto precio del petróleo generó más dinero para las cuentas del Estado. Mientras que por el lado de los gastos, ha sido cauteloso, sobre todo en obra pública. Lo presupuestado para 2022 era $1.524 millones, pero se gastó $1.311 millones, al cierre del año.
Otro logro que resaltó el Gobierno al cierre de 2022 tiene que ver con la final del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por primera vez en dos décadas.
Pese a los objetivos alcanzados, por el régimen de Guillermo Lasso, el país todavía no logra cuajar una mayor confianza. El riesgo país de Ecuador cerró 2022 en 1.250 puntos.
En términos generales, el riesgo país es un indicador que mide las posibilidades de pago de deuda de un país y es elaborado por el banco estadounidense JP Morgan.
Si bien el indicador se ha reducido en los últimos meses luego del paro de julio de 2022, en el que se situó sobre los 1.700 puntos, si el Gobierno emitiera bonos de deuda en los mercados internacionales actualmente la tasa de interés estaría por sobre el 10 %.
Para Santiago Mosquera, decano de la Escuela de Negocios de la Universidad de las Américas (UDLA), aseguró que por ahora hay dos inquietudes en los inversionistas: qué pasará entre Ecuador y el FMI en 2023, si se suscribirá un acuerdo para atender las necesidades de financiamiento y qué sucederá en 2025, tras el final del período de Guillermo Lasso.
“Se ven bien los resultados fiscales, pero a partir de 2025 los pagos de deuda crecerán y eso ocurrirá con una nueva administración y por eso existe mucha incertidumbre en el mercado”, señaló Mosquera.
Además, si bien Ecuador está bien en el ámbito macroeconómico, comparado con otros países, el problema actualmente es político, concluyó Mosquera.
Con él coincide Siobhan Morden, directora General de Estrategia de Renta Fija de Santander Investments. Contar con más recursos para pagar la deuda desde 2025 es complicado por la rigidez presupuestaria con presiones políticas y sociales que resisten aumentos de impuestos y recortes de gastos y subsidios.
Otros datos fiscales de 2022
- Salarios: El 2022 cerró con un gasto en sueldos y salarios de $9.174 millones, una cifra superior en $88 millones a lo previsto en el presupuesto. El monto en sueldos y salarios subió en 2023 debido a reclasificación de gastos, según Finanzas.
- Operativos: Los gastos en bienes y servicios, es decir, los montos en insumos operativos del Estado, como papel, gasolina etc. cerró 2022 en $6.940 millones. El número subió en $ 793 millones frente a lo previsto en el presupuesto inicial para 2022.
- Atrasos: El fisco cerró el año con un monto en atrasos de $1.507 millones. La cifra corresponde a lo pagado frente a lo devengado de la ejecución presupuestaria. Finanzas ha buscado ponerse al día con los pagos atrasados.