El IESS apunta a maromas internas para paliar iliquidez
Evitar un incremento de pensiones ha implicado bajar su presupuesto en $ 424 millones y despedir personal. Por otro lado, se faculta a la entidad a nuevos métodos de inversión
El abismo de iliquidez que, en plena pandemia rondaba a la seguridad social, obligó a redireccionar las cuentas del IESS a un orden que si bien permite evadir baches de cobertura, aún no garantizan la solvencia de la entidad a largo plazo.
El IESS financiará los décimos de los jubilados con ayuda de otros fondos
Leer másPrevio al anuncio de recibir del Gobierno $1.400 millones en efectivo y bonos, el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) ha debido disminuir su presupuesto de este año, despedir personal, redistribuir el uso de los recursos de cada fondo para cubrir obligaciones con sus afiliados y ampliar sus mecanismos de inversión. No obstante, Jorge Wated admite que sin bien algunas de estas medidas impidieron tomar medidas drásticas (como el elevar el aporte de las pensiones), no son suficientes para dar a la entidad una futura estabilidad. Conozca algunas medidas tomadas.
- Menos presupuesto para este año y eliminación de personal
La falta de pago del Estado, correspondiente al aporte del 40 % a las pensiones de los jubilados, obligó a que el Consejo Directivo del IESS aprobara en septiembre pasado disminuir el presupuesto anual de la entidad: $ 424 millones de los cerca de $ 9.000 millones que se tenían previstos para este año. Jorge Wated, presidente de la institución, detalló que gran parte del monto mermado corresponde a la eliminación de personal en áreas administrativas, dentro de la operación de hospitales de la entidad. Este año, la entidad no solo ha tenido que operar sin el pago de recursos estatales (cerca de $ 1.400 millones de parte del actual Gobierno) sino que ha tenido que enfrentar una pérdida de aportes tras la pérdida de empleos generada a raíz de la pandemia. Hasta lo que va del año, más de 300.000 personas se han desafiliado al Seguro. De ese monto, dijo Wated, se han logrado recuperar 35.000, una cifra que esperan mejorar con una política institucional que apunta a fomentar la afiliación voluntaria. El foco está puesto en migrantes, a quienes se les está activando nuevos mecanismos de pago, como el uso de tarjetas de crédito.
- $ 1.400 millones, el pago que no salda una deuda antigua
El anuncio del Ejecutivo de pagar $ 1.400 millones ($ 600 millones en efectivo y $ 800 millones en bonos) por concepto de las aportaciones del 40 % a las pensiones de los jubilados, genera un alivio en las arcas del IESS, pero abre la expectativa sobre una pronta solución al cobro del saldo que el anterior Gobierno fue ocasionando.
Se trata de la deuda más antigua y de mayor peso: cerca de $ 6.700 millones, de los cuales, dice Wated, una mayoría corresponde a la cobertura de salud ($ 3.800 millones). Pero para esto no existe una meta ambiciosa, pues el Consejo Directivo actual se plantea al menos cerrar su ciclo con la transparencia y consolidación de dicha cifra, debido a las diferencias que existen en los registros del Ministerio de Finanzas. Para ello se propone una mediación y una auditoría que ayude a definir el valor real de dicha obligación.
- Transferir recursos de un fondo a otro
Ante un problema de iliquidez, uno de los temas que mayores presiones causaba era cómo financiar el pago de décimos (el tercero y cuarto) que se incluye en las pensiones que mes a mes reciben los jubilados. Por años, ese rubro no estubo cubierto, lo que demandaba mayores esfuerzos financieros a la entidad. La alternativa elegida, no socializada previamente con los afiliados, fue aplicar una reforma de distribución de los aportes que se destinan al seguro de desempleo. Con esta reforma, este fondo ya no recibirá el mismo monto de recursos pero esto, según señala Wated, evitó que los afiliados tengan que pagar recursos adicionales.
Los datos del INEC generan críticas, pero pocas soluciones
Leer más- Búsqueda de financiamiento para coberturas pendientes
La necesidad de trazar la sostenibilidad del Seguro Social sigue siendo un pendiente. Así lo reconoce el presidente del IESS, quien cita como una tarea el definir la forma en cómo se financiará la cobertura de salud de los hijos menores de los afiliados y los pacientes que sufren de enfermedades catastróficas. Para eso se tendrán que tomar medidas que generen recursos que permitan seguir dando ese servicio. Sobre la atención de los hijos menores, dice, “aún no se ha tomado una decisión hasta tener una visión clara de lo que podemos optimizar en compra de medicamentos”. Otra vía será revisar el cálculo de las pensiones (tomando en cuenta un mayor rango de años de los mejores aportes) y nuevas opciones de inversión. Un incremento en las pensiones no ha quedado descartada. Todo depende, admite, del cumplimiento del Estado en sus pagos y de cómo se administre al IESS.
- Titularizar la cartera quirografaria
Respecto a la inversión, la Junta Monetaria emitió dos resoluciones para facultar al Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (Biess) a recibir créditos dentro y fuera del país. Según Wated, mencionó que una de las estrategias es apuntar a la cartera quirografaria, una de las más rentables. La idea, dijo, es titularizarla y venderla internacionalmente.