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Uno de los argumentos para eliminar el tributo es la baja recaudación.Pixabay.

El impuesto a la herencia recaudó $ 180 millones en la última década

Lasso eliminará el tributo por su baja recaudación. La OCDE sugirió en este año hacer lo contrario: subir el tributo para afrontar la crisis económica

El impuesto a la herencia, legados y donaciones vive sus últimos días. El miércoles pasado, el presidente de la República, Guillermo Lasso, anunció que lo eliminará y entre una de las causas señaló que no ha generado importantes ingresos al fisco.

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La eliminación será “definitiva, porque no genera ingresos al fisco, es muy fácil eliminarlo”, dijo Lasso.

“El más modesto de los ecuatorianos es dueño de un terrenito, es dueño de una casa, es dueño de un barco pesquero, es dueño de una finca. ¿Y qué es lo que quiere? Que el esfuerzo de su vida llegue a sus hijos, no al Estado”, señaló el mandatario.

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Infografía.Expreso.

¿Cuánto deja el impuesto al fisco? Según datos del Servicio de Rentas Internas (SRI), desde 2015 se ha recaudado entre 14 y 29 millones de dólares al año. Las cifras eran inferiores en períodos pasados. En total, en la última década, han ingresado al fisco algo más de $ 180 millones por ese concepto.

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En Ecuador el cobro del impuesto a la herencia existe desde el año 1927 por medio de la Ley de Herencia, la cual fue reformada en 2008. En 2015, el Gobierno del expresidente Rafael Correa anunció el cobro de un impuesto a las herencias superiores a los $ 35.400 y el combate a la “plusvalía ilegítima”, como parte de un plan contra la inequidad.

“Enfrentaré el costo político que sea necesario, pero en los próximos días también enviaré a la Asamblea Nacional un nuevo sistema impositivo para las herencias superiores a los cien salarios básicos unificados”, que equivalen a $ 35.400, señaló Correa ante el Parlamento.

En efecto, la decisión de Correa tuvo un alto costo político y movilizó a ciudadanos a las calles para protestar ante la Ley de Redistribución de la Riqueza. Si bien el exmandatario ofreció enviar una propuesta reformada, no lo hizo.

Actualmente en el país rige el tributo, que va del 5 % al 35 % y se paga por una sola vez al recibir la herencia, y lo cancela cada uno de los herederos en función de la parte que recibe. La base imponible para 2020 fue de $ 72.090, según el SRI.

La decisión de Lasso va en vía contraria a los planteamientos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), considerada como la entidad de buenas prácticas.

“El impuesto de sucesiones puede desempeñar un papel importante para aumentar ingresos, reducir desigualdades y mejorar la eficiencia”, señaló el informe ‘Fiscalidad de las herencias en los países de la OCDE’. El organismo sugirió revisar la fiscalidad de esta figura, más aún en un momento como el actual, con los recursos públicos golpeados por la crisis y ante la perspectiva de un aumento de la desigualdad.

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Para el tributarista Napoleón Santamaría, no es una excusa la poca recaudación del tributo para eliminarlo. Al igual que la OCDE, Santamaría señaló que el impuesto sirve para reducir la desigualdad en economías como América Latina y opinó que su eliminación “es un error”.

El impuesto a la herencia es el segundo del que el Gobierno de Lasso anuncia su eliminación. El primero fue el Impuesto a la Salida de Divisas (ISD).

A través del Decreto Ejecutivo 182, emitido el 2 de septiembre de 2021, Lasso eliminó el ISD para las aerolíneas que operan en el país.