Las jugadas maestras de Gad Goldstein
El accionista de Delcorp y Ecuagran desvió sus activos. Pasó antes y poco después de la intervención de la Superintendencia
Pocos días antes de entrar Delcorp y Ecuagran en un proceso de intervención por parte de la Superintendencia de Compañías, no solo se transfirieron acciones que sus accionistas relacionados tenían en otra empresa, sino que se vendieron vehículos (todos marca Ford) a personas vinculadas y se transfirieron dineros a una empresa extranjera proveedora de materias primas. Fueron las jugadas maestras de Gad Goldstein Valdez (accionista de las empresas) y de su alfil, Enrique Weisson Accini, antes de salir del país, el 3 de agosto de 2020.
Hoy la información a la que ha tenido acceso Diario EXPRESO por varias fuentes, tiene otros hilos que conducen hasta Storeocean (una terminal granelera privada), le Banco del Austro (donde estaban depósitos plazo) y la empresa Nitron Group Corporation, domiciliada en Estados Unidos.
Aunque todavía no se ha llegado hasta la raíz del problema que provocó la insolvencia de Delcorp y Ecuagran y su posterior endeudamiento, calificado como “irregular” por parte del Gobierno, a través del mercado de valores por más de $ 64 millones emitidos en facturas comerciales y obligaciones, ya desde antes de agosto de 2020 los directivos de esta segunda empresa decidían si pagar a tiempo a los empleados de planta o a los administrativos. Ya no había dinero.
Tampoco hay rastro de a dónde fueron esos 64 millones. Lo que sí se sabe es que el 21 de julio de 2020 (la crisis real estalló en agosto de ese mismo año), Enrique Huerta Egüez, gerente general de Delcorp, le ordena al Banco del Austro la transferencia al exterior de 2,5 millones de dólares a Nitron y ese mismo día Enrique Weisson Accini, de Ecuagran, le ordena al mismo banco precancelar un certificado de depósito por $ 2’690.280, que fueron acreditados a la cuenta corriente 809229688 de Delcorp. Este certificado vencía el 19 de octubre, esto es, después del cierre de la empresa, lo que hace presumir que movieron dinero para que no sea incautado por dos de los deudores, y los principales, el Isspol y el Biess (Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social). Este dinero fue transferido a Nitron.
La Superintendencia conocía de las irregularidades de Ecuagran desde el 2018
Leer másEn esa misma fecha se vencían otros $ 2’257.650 y el 19 de noviembre 74.840 dólares, pero ese fue precancelado el 31 de agosto como segundo pago de la garantía bancaria, también a favor de Nitron. Estos movimientos constan en la carta que el 3 de septiembre (21 antes del cierre) envía Santiago Miranda, procurador del Austro, a las empresas. Los accionistas lograron esto poco antes de la intervención (para algunos expertos, demorada) de la Superintendencia, que recién el 8 de octubre inicia un concurso preventivo.
Para esas fechas, ya los barcos que estaban en camino a Ecuagran y que se hallaban en Panamá se desviaron por los consabidos problemas. Allí llegaban hasta 4 barcos al mes para desembarcar cereales para empresas fuertes como Cervecería Nacional, Gisis, Molinos Poultier, la Moderna. Algunas de ellas perdieron parte de su materia prima: no estaba en los silos según los contratos.
El 19 de octubre de 2020 hay un movimiento accionarial en Storeocean, una terminal granelera que tiene como accionistas principales a Agripac y a Delcorp. Ese día esta segunda compañía le transfiere $ 3’638.902 en acciones desde su fideicomiso a Nitron Group; y este a su vez, nueve días después, le transfiere ese mismo valor a la empresa Agripac (proveedora de insumos agrícolas).
Trazada la ruta del dinero del Instituto de Seguridad Social de la Policía (Isspol)
Leer másAgripac y Delcorp son accionistas en Storeocean, y Delcorp a su vez es de Ecuagran, a través del accionista Gad Goldstein Valdez. La relación entre el puerto granelero Storeocean y Delcorp no solo es accionarial, sino comercial. El trigo importado muchas veces por Ecuagran no llegaban allí, sino a Storeocean.
Según la Ley de Compañías, estas podrían ser considerado un holding o grupo económico.
Según un informe de la Superintendencia de Compañías, solo en facturas comerciales de Delcorp y obligaciones de Ecuagran el Instituto de Seguridad Social de la Policía (Isspol) tiene impagos 21’694.249 dólares.
Al abogado Alfredo Ledesma Cornejo, director legal de Agripac, señaló a Diario EXPRESO la compañía Storeocean es una compañía que su actividad principal es prestar el servicio de procesamiento y almacenamiento de fertilizantes a terceros.
“La compañía Agripac S.A. adquirió el 50 % de las acciones de la compañía Storeocean en el mes de agosto del año 2011, que nos interesó por tratarse de una planta industrial que procesa fertilizantes, que le permitía a Agripac procesar y/o ensacar el fertilizante que importa, además de hacer mezclas para producir fertilizantes especializados para diversos cultivos como maíz, arroz, banano entre otros”. El otro accionista con el 50 % era la compañía Delcorp S.A., o sus compañías relacionadas, considerando que también se dedicaba a la actividad de importar fertilizantes, resalta Ledesma.
Sin embargo, se aclara que la compañía Agripac no tiene ninguna relación con la compañía Delcorp ni con la compañía Ecuatoriana de Granos Ecuagran S.A., “es decir, no somos ni accionistas, ni participamos en su administración, ni conocemos ni aprobamos sus operaciones, balances, contabilidad, etcétera.
“En el mes de enero del año 2018, Delcorp aportó el 40 % de su paquete accionario que mantenía en Storeocean en un Fideicomiso de Garantía denominado Fideicomiso Delcorp, que garantizaba obligaciones de pago a favor de Nitron Group Corporation, que es un proveedor internacional de fertilizantes con sede en los Estados Unidos, es decir, que desde el mes de enero del año 2018, Delcorp S.A. era propietario básicamente del 10 % de la compañía Storeocean S.A., sin embargo, siempre administró a la referida compañía, hasta el mes de agosto del 2020, y a partir del 31 de agosto del 2020, la administración de Storeocean la tomó Agripac S.A”.
Alfredo Ledesma Cornejo, director legal de Agripac, sostiene que el 2 de octubre del 2020, la compañía Nitron Group Corporation recibió del Fideicomiso Delcorp, en calidad de dación en pago, el 40 % de las acciones de Storeocean y Agripac compró ese 40 %, y el 21 de octubre del 2020 endosaron las referidas acciones a favor de Agripac, que es actualmente propietario del 90% de Storeocean”.
LOS MILLONES INVERTIDOS DE LOS FONDOS. Ecuagran, en varias ocasiones, almacenaba parte del trigo y otras materias primas que traía para el “pool de molinos”, en Storeocean. Sin embargo, no se sabe si ese grano fue incluido en los inventarios del deudor del Instituto de Seguridad Social de la Policía (Isspol). Los detalles de estas se hallan en investigación.
Los saldos por amortizar de Ecuagran y Delcorp, en facturas comerciales y obligaciones, ascienden a $ 64’274.931, de acuerdo con el informe de la Superintendencia de Compañías, Valores y Seguros acerca del Depósito Centralizado de Compensación y Liquidación de Valores (Decevale).
Estas acreencias (facturas comerciales y papel comercial) no solo son con el Isspol, sino con algunos fondos de inversión: las Fuerzas Armadas, obreros y trabajadores de CNT-EP, el Ministerio de Finanzas y Aduanas, empleados del Gobierno Municipal de Otavalo y de Ibarra. Y hasta la Bolsa de Valores de Guayaquil (108.000 dólares). En la lista de acreedores con estas dos empresas destacan además el Banco del Austro, el Fondo de Inversión del Magisterio, Seguros Sucre, Biess, Fideicomiso Mercantil FIAS, Corporación Financiera Nacional (CFN) y otros inversores con menor volumen.
Ecuagran, de enero a diciembre de 2019, tuvo 21 clientes, los mayores importadores de trigo del Ecuador: Modernas Alimentos, Grupo Superior, Gisis (alimento para camarón), Industrial Molinera, Ibalnor, lo que denota su importancia en el mercado.
Estas cinco empresas importaron ese año 726.862 toneladas métricas, el 61,96 % del total llegado a sus silos.
En total, dicho año fueron importadas por Ecuagran 1’173.289 toneladas métricas, según informes.
"EN LA PANDEMIA TRABAJAMOS HASTA LOS DOMINGOS". Ecuagran es una de las empresas de servicios portuarios de graneles y también un depósito aduanero que daba servicios a las industrias más importantes. De las 1,17 millones de toneladas que al año manejaba, solo 60 mil eran propias. El embarcador mundial más grande que enviaba grano era Cargill, seguido por Luzar Trading, Viterra, Bunge Latin, Parrish & Heimbecker.
Es decir, la empresa generaba buenos ingresos. Por eso sus casi 60 empleados se preguntan qué pasó. Sus primeras dudas surgieron cuando se inició una reducción de los gastos y la empresa empezó a privilegiar pagos, “pese a que durante la pandemia tuvieron tanta carga que se trabajaba hasta los domingos”.
Según cuenta uno de los responsables de la planta, se “almacenaba trigo, cebada, pasta de soja, malta. El barco llegaba y los granos iban directamente a los silos. Son 29 silos, la mayoría para trigo”. Solo la Cervecería tenía de 5 a 6 silos ocupados.
Toneladas
de trigo embarcó la multinacional Cargill hasta los muelles de Ecuagran en 2019.
“En la pandemia trabajamos ‘a full’ y se cerró la planta cuando se fugaron los accionistas, cuando reventó el problema. Llevamos cuatro meses impagos. Solo se hace mantenimiento, pero si hay demanda podemos comenzar a operar”, afirma.
“Esto sí se vuelve terrible cuando (Goldstein y Weisson) desaparecen y no hacen asistencia a Ecuagran. Esto se corrió como la pólvora, tenían una semana de no venir. Los clientes que eran molineros de la Sierra, la Cervecería y todos los que tenían sus productos aquí, querían retirarlos. Al ver eso, los clientes llaman a los abogados Pino, que son los que representan a estos señores, y estos vienen y es así que empezaba el hilo del problema. Los clientes empezaron a retirar lo que tenían, algunos no retiraron sus granos completos; llegaban a bodega y se les hacía guía de despacho. Los barcos que venían por Panamá o Colombia se regresaron”.
de trigo embarcó Luzar
Trading hasta los muelles de Ecuagran en 2019.
Empleados no se explican por qué quienes deben dar la cara huyeron. “Esa es la primera pregunta que me hago.Yo decía: ‘Si no han pagado una planilla del SRI, no es como para huir’. A los empleadores les pasa eso, a veces, cuando tienen un problema con una entidad de control”, manifiesta un operador de la planta que mantiene su nombre en reserva.