En medio de 30 hombres, una mujer despieza la res
El desposte de la carne en Ecuador por años fue un oficio exclusivo para varones. La labor requiere fuerza y precisión
Abrir una carne de manera perfecta para hacer un bistec o una parrillada no es un don que todos tienen. Ahora, cuán más complejo es la tarea del desposte. La labor consiste en hacer piezas y cortes especiales, un oficio que, en Ecuador, ha sido por muchos años exclusivo para varones, pero hace un año Daysi Burgos, de 31 años, aceptó el reto.
Daysi explicó que el desposte es el arte de transformar la carne en diferentes tipos de corte; por ejemplo, de un cerdo puede separar la chuleta, lomo o bife, el costillar, la panceta, el lomo, la bondiola, etc.
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El ejemplo de ella inspira a no poner límites ante las metas laborales y aquí empieza una historia de una mujer que se atrevió a reducir las brechas de género.
Daysi trabaja en el Centro de Distribución de Almacenes Tía desde hace 10 años, ingresó allí para ser auxiliar, su principal tarea era despachar las bandejas con las carnes que estaban adecuadamente empacadas. Pero hace un año sus jefes le preguntaron si deseaba aprender el arte del desposte de la res y del cerdo.
Daysi Burgos
Su inspiración para aceptar el reto fue pensar que su salario mejoraría y eso le permitiría atender de mejor forma a sus hijos, sobre todo para cubrir adecuadamente las necesidades de ellos. Hay estudios que dicen que criar un hijo desde que nace hasta que termina la universidad mínimo cuesta 150.000 dólares. Si esa cuenta se aplica, Daysi necesita contar de base con unos 300.000 dólares para cubrir las necesidades de sus dos hijos. Ella cuenta con el apoyo de su esposo, pero con un solo salario no se puede cubrir todos los gastos en un hogar de cuatro miembros.
Así que animada empezó a hacer la capacitación que le dio la misma empresa, esto duró nueve meses. “Al inicio, como mis músculos no estaban acostumbrados me dolían las manos y los brazos, porque la tarea demanda fuerza y precisión”, contó Daysi a Diario EXPRESO.
Un año después, Daysi en un día alista más o menos 55 kilos de carne, ahora sí sus músculos se han tonificado con el diario trabajo. Ella detalló que antes de formar los cortes especiales de la carne hay que limpiarla de la grasa y venas, etc.
“Nadie que no se hubiera capacitado para hacer el desposte, puede coger un cuchillo en mi trabajo y es que es una herramienta que hay que aprender a usar para hacer un corte preciso de la carne”, señaló.
Daysi vive en Guayaquil y para llegar a tiempo se levanta a las 04:30 para preparar el desayuno para su familia, porque ella forma parte de las mujeres que trabajan fuera de casa sin renunciar a ser una madre que atiende personalmente las tareas de su hogar. Por esto, ella no solo es un ejemplo para las fechas especiales en que se celebra a una dama, como son el Día de la Mujer o el Día del Trabajo, sino también en el Día de la Madre.
En marzo de 2024, la tasa de empleo global se ubicó en 96,6 % para los hombres y 95,8 % para las mujeres, según las estadísticas del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).
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