La motivación laboral disminuye en la región

La motivación laboral ha retrocedido en América Latina, donde solo el 43% de los empleados afirma estar satisfecho con sus superiores. Es decir, hay una desmotivación a la hora de trabajar por parte del 57 % de los empleados, según un estudio del Grupo Adecco, empresa global de Recursos Humanos.

Según el informe, esta desmotivación se da cuando los trabajadores no se sienten tan comprometidos o conectados con la empresa o cuando simplemente no pueden ver la importancia de su función a mayor escala.

“Los efectos son claros, en el campo de los recursos humanos, los empleados motivados son más productivos. Aparte de la eficacia de los equipos, también se demuestra que la motivación impulsa la fidelización y mejora la cultura de la organización. Los líderes tienen la capacidad de reconectar a los empleados y reinventar la cultura laboral”, explica el informe en palabras del especialista Sebastián Lima, director Business Solutions de Adecco Ecuador.

Este retroceso en las relaciones, en la motivación, en el sentido de equipo y la cultura empresarial se ha marcado desde la pandemia del COVID, en el año 2020, según Adecco. En las encuestas, los empleados sin puesto de supervisión revelaron los peores niveles de motivación.

¿Qué hacer?

Para reconectar la motivación laboral entre colaboradores y empresas, la compañía de Recursos Humanos da algunos consejos a tomar en cuenta: 

1. Primero para renovar la motivación, los trabajadores pueden preguntarse ¿cuál es la razón por la que hago el trabajo?, ¿es significativa?, ¿contribuye a algo importante? Así, encontrará el propósito más grande y priorizará la calidad de las actividades. “Los líderes tienen una gran responsabilidad en este punto. Deben motivar constantemente a sus colaboradores. Existen muchos tipos de reconocimientos que van más allá de lo económico y que tienen que ver con temas de bienestar”, dice el informe.
2. Otro punto importante, dice la empresa de Recursos Humanos, es buscar inspiración en modelos a seguir. Es decir, tener a alguien a quien admirar, evitando la idealización. “Un colega o algún líder que nos motiva en cuanto a su gestión y en la forma de conseguir las metas laborales”. 
3. Organizar objetivos es otra de las recomendaciones. Lo que significa desglosar los objetivos en acciones manejables. “Si siempre se tiene esto en cuenta, los triunfos más pequeños y habituales conseguirán generar un impulso, siempre que resulten significativos y señalen de un modo claro hacia un fin a más largo plazo”, dice Adecco.
4. Y por último aprovechar la autocompasión; es decir, trabajar para poder ser más amable consigo mismo cuando se presenten dificultades o aparezcan errores. “Siempre es posible volver a empezar”, concluye.

Para seguir leyendo EXPRESO sin restricciones, SUSCRÍBETE AQUÍ